Entre las novedades que incluyeron en el desfile del 5 de Julio estaban unos drones iraníes que supuestamente fueron ensamblados en Venezuela por la Empresa Aeronáutica Nacional, filial de Conviasa, como parte de lo que han llamado «un escuadrón de inteligencia, vigilancia y reconocimiento».
El detalle seguramente pasó inadvertido en Los Próceres porque la gente fijó su atención en el monigote inflable. No era para menos. Pero ahora el Centro para la Sociedad Libre y Segura (un think tank que se dedica a seguir las actividades de los países “VRIC”: Venezuela, Rusia, Irán y China) reveló que en el país se celebrarán en agosto unos juegos de guerra identificados como “Sniper Frontier”.
La fuente dice que Rusia los organiza y que ya está todo listo. Además, participarán otros países como Bielorrusia, Armenia y Serbia. El año pasado se desarrollaron en Vietnam, pero ahora a las grandes naciones que se oponen a Estados Unidos les interesa mandar un mensaje claro y por eso usarán a Venezuela, para que no queden dudas de su cercanía.
La competencia se divide en cuatro etapas: evaluación de habilidades individuales, evaluación de pares, evaluación de equipos y evaluación de velocidad. Los participantes deben usar tres armas, a saber, la pistola Makarov K59, el rifle automático AK74 y el rifle de francotirador SVD de 7,62 mm.
Así que a Maduro poco le importa haberse burlado del 5 de Julio, la fecha patria venezolana por excelencia, pues podrá hacer alarde de los amigotes que tiene y a quienes prácticamente les ha entregado el país. Lo que sí es indudable es que de una experiencia como esta siempre se aprende, ¡qué gran logro para el recién ratificado Vladimir Padrino López!
El portal The Washington Free Beacon insiste en que es una prueba de que estos países están dispuestos a molestar a Estados Unidos escudándose en el discurso de que abogan por un mundo multipolar. Pero casualmente Venezuela, China, Rusia e Irán son objeto de sanciones de esta y otras naciones.
En el momento en que el propio Vladimir Putin ha asegurado que lo de Ucrania apenas comienza, el canciller de Nicolás Maduro se reúne con Sergei Lavrov y le reitera el apoyo incondicional del gobierno chavista. A los venezolanos no les han preguntado si están de acuerdo con respaldar a Rusia y ni hablar de estos ejercicios de guerra en el país. Pero así es el totalitarismo. Ojalá los soldados y demás oficiales se cuestionen acerca de esta participación.
Pero volviendo a los drones, con el conocimiento que se tiene de cómo operan en las fronteras los grupos irregulares con la anuencia del gobierno chavista, es más factible que ese «escuadrón de inteligencia, vigilancia y reconocimiento» sea utilizado en operaciones más domésticas como completar el espionaje a los ciudadanos que ya comenzaron con Movistar. Por cierto, «un ejercicio» del cual no han rendido cuentas.