Del gobierno comunal se viene hablando en Venezuela desde que Chávez tomó el poder político en el año 1998, pero es durante el período legislativo de 2006 cuando la Asamblea Nacional, en manos de una mayoría chavista, aprueba la primera ley de comunas; sin embargo, a pesar de las implicaciones y consecuencias negativas que traería consigo la instauración de un sistema como este en el país, las cuales ya avizoraban algunos legisladores y expertos en el tema, y considerando la información que se dijo y escribió sobre ello en ese momento, se puede observar un desconocimiento generalizado sobre el tema, y es que muy pocos coterráneos tienen alguna idea de qué es o cómo funciona el sistema de gobierno comunal, y si trae consigo algún beneficio real para el pueblo.

El tema de las comunas es muy extenso y presenta diversas vertientes relacionadas a estas; existen cientos de bibliografías sobre este asunto que en ciertos casos discrepan entre sí, por lo que el objetivo de este trabajo es dar a conocer un pequeño esbozo del funcionamiento de un sistema de organización social que ha sido desechado por muchos Estados por considerarlo ineficaz, pero también adoptado por unos pocos, principalmente como medio de control social, trayendo ruina y fracaso, además de consecuencias nefastas para los ciudadanos.

En Venezuela han existido bajo un funcionamiento de regular a bien desde el inicio de la descentralización dos formas de organización comunitarias: las “asociaciones de vecinos” y las “juntas parroquiales”, las cuales hasta el presente y teniendo en cuenta las fallas que presentan, han servido de canal entre los ciudadanos y el ente gubernamental más próximo –la alcaldía– para resolver diversos problemas que afectan a las comunidades. Es importante señalar que, según algunos estudiosos del tema, la principal falla de esta forma de organización, radica principalmente en la participación popular, la cual es y ha sido muy difícil de conseguir en la sociedad venezolana, pero esto no puede ser excusa para reemplazar uno por otro.

Debido a la crisis generada por las múltiples fallas durante el mandato de Chávez, el proyecto comunal fue engavetado. Por lo visto, los encargados de llevarlo adelante se dedicaron a otras labores que tenían que ver más con economía y finanzas, por referirnos a sus objetivos de aumentar el ingreso financiero de sus cuentas bancarias personales, y al fallecer el líder de la revolución, el proyecto comunal quedó congelado. Hace unos días, los primeros del mes de febrero del corriente 2021, Nicolás Maduro anunció relanzarlo por medio de la írrita recién elegida asamblea nacional, la cual fue conformada en un fraude electoral.

Según su planteamiento, el gobierno comunal va a otorgarle poder de forma directa al pueblo, pero esto es algo que, según la historia mundial, en los países en donde se ha implantado este tipo de sistema, nunca se ha conseguido, por lo que sería ilusorio pensar que en Venezuela sucederá lo contrario. Para entender mejor el por qué, hay que comenzar por remontarnos a la Italia medieval, en donde las ciudades que no pertenecían a un feudo, se las denominaba Comunas. Con el paso del tiempo y con la llegada del Renacimiento, surgió una nueva clase social denominada Burguesía, la cual trajo consigo la disminución del poder económico y político de los Señores Feudales y su posterior desaparición, sustituyéndolas por gobiernos autónomos. Con el triunfo de la revolución francesa en 1789, se consolida el modelo de Comuna gracias a una ley aprobada por la asamblea nacional, y a partir de ese momento, dicho modelo se propaga por toda Europa, considerando a la Comuna, la parte más pequeña en la división administrativa territorial que posee un municipio.

Posteriormente, en el año 1871, como consecuencia de la guerra franco/prusiana, y gracias a los sectores socialistas de la época, se crea un consejo local en París, al cual se denominó Comuna de París, constituyéndose por primera vez un modelo de organización comunitaria eliminando la separación entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, permitiendo asumir el control de manera anárquica.

Además de la de París, e incluso mucho antes que esta apareciera, se dieron otras formas de organización comunal en otras partes del mundo, tales como la de los colonizadores ingleses asentados hacia el norte del continente americano, como por ejemplo los quakers o los mormones, quienes se posesionaban de un territorio para consolidar el asentamiento de una comunidad y su cultura, basándose en la convivencia y cooperación mutua, mas no en el colectivismo. Respetaban la libertad individual y la propiedad privada, así como las diferentes formas de participación política que traían consigo y que más tarde, en el siglo XVIII, dieron forma a una nación: los Estados Unidos de América.

Se puede mencionar también el modelo de comuna implementada durante el proceso de creación del Estado de Israel, que, si bien se inspiró en el modelo soviético, sufrió un giro radical para darle como principal propósito el concebir una sociedad económicamente productiva, que mantuviese un vínculo directo con su pasado histórico y religioso, garantizando así su consolidación como república, su seguridad y su supervivencia.

Pero es durante el inicio del siglo XX, con el nacimiento de Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), cuando se desarrolla y se establece la idea de modelo de comuna con un fin estrictamente político, que permitiese generar un régimen centralista y controlado desde un centro de poder. Lo denominaron Soviet y fue ideado por Marx y Engels con la idea de devolver el poder al proletariado, lo cual nunca sucedió, más bien sirvió para que un grupo de individuos liderados por Stalin desde Moscú, se convirtiesen en “los nuevos señores feudales”, aprovechándose de la clase proletaria que prometieron defender. Durante su instauración, perdieron la vida más de 3 millones de personas por hambre y frío. La corrupción desbordada y la ineficacia en las políticas económicas y públicas, produjeron la falta de competitividad económica con el creciente mercado industrial naciente en Europa y Estados Unidos, lo que produjo la quiebra del Estado Soviético.

Algo similar ocurrió en la China de Mao Zedong quien adaptó el modelo totalitario de comuna marxista, por medio de un proyecto al cual denominó “el Gran Salto Adelante”. Con él, pretendía llevar a China a un proceso acelerado de industrialización y crecimiento económico, basado en el establecimiento de un sistema de comunas que serviría para reorganizar a la sociedad China, así como la prohibición tajante de toda actividad productiva de índole privada.  Lamentablemente al igual que en la URSS, estos fueron los ingredientes necesarios para un coctel fatal, ya que se produjo la muerte de más de 30 millones de personas, como consecuencia de la hambruna desatada. Es necesario mencionar que la dieta que se observa hoy en día en China, compuesta por platos que incluyen perros, gatos, murciélagos y muchos tipos de insectos, se debe precisamente a la hambruna sufrida durante la época de instauración del modelo comunista chino. No es, como muchos piensan, una dieta tradicional con un origen antiguo.

Sin embargo y a pesar de que el modelo chino-comunista fue una adaptación del soviético, después del año 1973, la forma original de organización comunal diseñada como herramienta de control popular, cambió por otra con un carácter exclusivamente económico, centrándose en formas de producción agrícola e industrial, alejándose por completo de la visión político-estatista, pero manteniendo la bota militar de una feroz dictadura, sobre la cabeza de los ciudadanos chinos, incorporándolos de forma obligatoria y con muy poca o sin ninguna retribución salarial, al naciente sector industrial/productivo. Esto permitió el gran avance del país asiático hacia la potencia económica que conocemos hoy, pero basada en lo que se podría considerar, una forma moderna de esclavitud.

Como podemos ver, salvo por algunos detalles adicionados por asuntos culturales y regionales, el proceso de instauración del nuevo sistema de organización comunal, se ha repetido casi de forma idéntica, tal como sucedió en Europa del este con el nacimiento de la URSS, al inicio de la Revolución China de Mao, o luego de la revolución de Fidel en Cuba. Sin embargo, llama la atención que en todos ellos hay un elemento que resulta contradictorio, ya que la ideología que los sustenta se basa, entre otras cosas, en la lucha contra la explotación del hombre, ejercida por la tan mencionada burguesía o clase dominante en el modelo liberal, por lo que cabe preguntarnos: ¿es que acaso no fue la explotación del hombre lo que sustentó el aparato industrial soviético?, y ¿no es esclavitud la que ejerce actualmente el sistema económico chino sobre su población?. Obviamente, después de ver por encima algunos ejemplos citados anteriormente, así como de conocer alguna de las consecuencias de dichos modelos sobre los pueblos soviéticos, chinos o cubanos, podemos concluir que no hay cosa más alejada de la realidad que la promesa de que una vez instaurado un gobierno comunal en Venezuela, se vaya a entregar, realmente, el poder al pueblo. Y es que en definitiva la idea de desarrollo y bienestar para el pueblo por medio de un gobierno comunal en Venezuela no es más que un cuento chino.

Referencias y enlaces

.- Anzola, A., (2006) Los Consejos Comunales en la Normativa Venezolana. Conceptos, ideales y Correlato Empíricohttp://www.jornadasestadoysociedad.net/documentos/Anzola%20Aurora%20Nieves.pdf.

.- COMUNICACIÓN, M. D. (Agosto de 2007). Explosión Del Poder Popular. Módulo Formativo. Caracas, Distrito Metropolitano, Venezuela: Ministerio del Poder Popular para la Información y la Comunicación.

.- Machado, J, (2009) Participación Social y Consejos Comunales en Venezuela. Revista de Economía y Ciencias Sociales, v 15, n 1. Abr. ISSN 1315-6411 versión impresa. Ministerio de Comunicación e información, Caracas, Venezuela.

.- Partido Socialista Unido de Venezuela PSUV (2004) La Nueva Etapa y El Nuevo Mapa Estratégico. Caracas Venezuela.

.- El Gran Salto Adelante, Wikipedia, la enciclopedia libre.

.- Comuna de París, Wikipedia, La enciclopedia libre.

 


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