Las cifras que se conocen acerca del empleo y la informalidad nos indican que los trabajadores formales han sido superados por los informales. Las razones son diversas, la actividad informal ya abarca una tercera parte del total de la economía nacional.

Anteriormente se conocía como trabajadores informales a los que ejercían como buhoneros, actualmente la informalidad cubre todas las áreas de la actividad económica nacional. Se estima que más de 1 millón de microempresarios desarrollan esta actividad y a la vez crean más de 5 millones de puestos de trabajo. Se destacan como principales sectores de la economía con la mayor actividad: comercial, donde se estima alcanzan a superar el 40% del total de las ventas en ropa del volumen total nacional; talleres, mantenimiento de equipos y electrodomésticos, pesca, construcción, agricultura, etc.

En la medida en que se han implementado mayores impuestos tanto nacionales como municipales, así como elevados aumentos de los servicios públicos, muchas de las empresas formales han reducido sus actividades o cerrado. A esto se suma una caída en las ventas, que ocasiona que los gastos superen los beneficios y las pérdidas sean imposibles de sostener. Se estima que 50.000 empresas han cesado sus actividades en los últimos 10 años, con sus efectos en la pérdida de empleos calculada entre 350.000 y 500.000.

La informalidad surge como una solución social al sostener más de 6 millones de puestos de trabajo, entre los propietarios de las distintas empresas informales y los que trabajan en ellas. Convirtiéndose la informalidad en la principal fuente de ingreso para cerca de 2 millones de familias. Muchas veces en estas empresas trabajan los miembros de una misma familia, de manera que los ingresos los permiten cubrir si no el total de sus necesidades, al menos buena parte de ellas.

La realidad económica y social del país es que hemos visto duplicar en los últimos 5 años la actividad informal, mientras que la actividad formal de la economía se ha desmejorado, sobre todo en los sectores productivos y de servicios. De continuar esta tendencia nos encontraremos en los próximos 3 años con que la actividad informal llegará a constituir la mitad de la economía nacional.

 


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