Las oposiciones, una debilitada que divaga y actúa con desaciertos, despojada y ultrajada en teoría por el injerencismo del Estado y la otra complaciente, tarifada y desatada, ambas sin pudor alguno, se cubren con el manto protector del régimen proponente del referéndum consultivo.

Esta convocatoria ha sido propicia para el debate de su conveniencia o no. Expertos coinciden con sobrados argumentos históricos, jurídicos y políticos que, por su contenido y origen, más que propulsar un elemento que ayude al proceso de reclamación, lo perjudica.

Sin embargo, la estrategia gubernamental que ha pretendido beneficiarse de esta coyuntura creada, ha generado un proceso en el que se estimula el fomento del espíritu nacionalista, en una nación empobrecida y esclavizada, que observa estupefacta el despliegue y las grandes movilizaciones, acompañadas de espectáculos y una inversión multimillonaria de promoción que morbosamente compite con la realidad que vive cada ciudadano en su vida cotidiana. Hay dinero para despilfarrar mientras el salario mínimo y las pensiones son de 3,6 dólares mensuales.

Funcionarios cuestionados del régimen, promotores de los antivalores durante años, son quienes recorren el país para pedir a la población que participen y la oposición construida por el régimen a su medida asombrosamente de manera abierta e impactante le hace la comparsa abiertamente con los trajes de la desvergüenza y el caradurismo pandémico desatado en Venezuela que persiste en dividir la unidad nacional.

Sectores de oposición que participaron en el proceso del 22 de octubre y que por diferentes razones declinaron o se retiraron, jugaron abiertamente al fracaso de las primarias y ante la respuesta ciudadana que dio la cara por el vacío que generaron, solo les quedó reconocer la victoria aplastante de los venezolanos con María Corina Machado al frente y seguidamente le ratificaron su apoyo.

Ahora bien, pareciera que a toda esa dirigencia decadente, pervertida y troglodita se le olvida que a quien acompañan en su afán de mantenerse en el poder, el señor Maduro y su modelo socialista, son los responsables de la enorme tragedia que vive el país. Se les olvida que sobre el señor Maduro y muchos de sus funcionarios pesan grandes acusaciones por diferentes causas, todas contra el pueblo venezolano. De gobernantes pasaron a verdugos de la sociedad y las familias venezolanas. Se les olvida que Venezuela es hoy el país más pobre del mundo, con la mayor migración en la historia universal. Se les olvida que miles de venezolanos mal viven por no tener las mínimas condiciones de vida y miles han muerto por no tener qué comer o cómo pagarse un tratamiento médico para solventar cualquier eventualidad de salud. Y se les olvida que han dilapidado los recursos de los venezolanos cuyos montos yacen en cuentas en paraísos fiscales, mientras la nación fenece en la inopia y crueldad revolucionaria.

La oposición trastocada y en parte corrupta y dolosa también es parte del problema. Todo lo que está aconteciendo, donde vemos a los actores visibles del sector de oposición, que aún se arroga la representación de 90% del país que quiere salir de Maduro contrasta con la realidad política actual donde la llamada plataforma unitaria perdió la representatividad que ostentaba y sigue tomando decisiones por los acorralados y vejados venezolanos.

Los venezolanos se han manifestado y ahora la representación de la oposición venezolana fue transferida, después de años de fracasos, en un acto cívico y democrático, reconocido por los actores del G4 el 22 de octubre, a la ingeniero María Corina Machado Parisca, quien tiene el deber de asumir ese primer mandato popular con toda legitimidad y tomar las riendas del manejo de las negociaciones con el régimen en los términos que ella reiteradamente ha manifestado y prometido al pueblo venezolano.

Ver la deprimente actuación de los líderes de organizaciones políticas que se agrupan para mantener sus espacios de poder y seguir la cadena de fracasos que les han brindado a los antes desesperanzados ciudadanos, está quedando para la historia como un modelo fraudulento y que es importante darlo de baja. La transformación pasa por desplazar la ineficiencia, el negociado y el fracaso por la meritocracia, la efectividad y el triunfo permanente en favor del progreso y bienestar.

Este referéndum para mi concepto termina de definir lo que se asegura y he escrito en anteriores artículos, donde afirmo que, en esta etapa política, la orden que hay ante la debacle política de los partidos y el desprestigio de sus dirigentes nacionales es todos contra María Corina Machado. Yo me atrevo a decir que la realidad es el pueblo junto a María Corina contra la decadencia partidista tradicional y el régimen prescrito que implantoó el difunto Chávez y que continuo quien dice que ama a su pueblo y lo alimenta con frijoles chinos , arroz picado y harina de segunda con dos sardinas de mala calidad mientras los que están en el ejercicio del poder de manera ostentosa muestran todo lo mal habido y en un estado sin ley y tolerante de la corrupción pretenden seguir abultando sus cuentas y blindando la nueva burguesía revolucionaria.

El referéndum y su resultado a corto no tendrán ningún efecto positivo y verán ustedes a todos los que lo acompañaron arropándose en un resultado que muchos aseguran ya tiene una cifra de participación -por supuesto amañada- superior a los cinco millones otros se atreven decir que 8 millones, para correr la arruga de la evidente impopularidad y rechazo que tienen todos. Pero el que lee las encuestas periódicamente sabe que no tienen nada.

Los venezolanos debemos empoderarnos para desplazar el marasmo dirigencial corrompido y falsario, nada efectivo que nos controla. la ultima encuesta de la firma Metaanálisis ante la pregunta cerrada ¿Por cuál de estos candidatos votaría usted en las elecciones presidenciales de 2024?  le da la ventajosa e inalcanzable cifra de 72,9% a María Corina Machado y el pírrico porcentaje de 7,9 % a Nicolás Maduro, 10,2% no sabe y 8,4% no contestó. Otros candidatos, todos aliados de Maduro, suman el ínfimo valor del 0,8 %.

Ante esta indiscutible realidad preparémonos para una feroz arremetida de todos los factores que van desde la salida del poder, pero que indiscutible y objetivamente con el pragmatismo correspondiente, no cuentan con ningún respaldo, comprobado en todos los estudios en los últimos 18 meses, por lo que la nueva consigna es, María Corina junto a el pueblo venezolano contra todos los enemigos del cambio ya conocidos por la gran mayoría. Confianza, trabajo y organización, fe y esperanza para vencer. Dios y la virgen nos sigan acompañando.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!