En una conversación que tuve con José Antonio Colina, líder de la comunidad de exiliados venezolanos en Estados Unidos y presidente de Vepex, una organización reconocida a nivel internacional en temas migratorios, se abordaron diversas opiniones y perspectivas sobre la situación de los migrantes venezolanos que llegan a Estados Unidos en la actualidad.
Colina expresó sus puntos de vista sobre la composición de este flujo migratorio, resaltando que una parte significativa de los venezolanos que ingresan al país no merecen ser acogidos debido a su presunta vinculación con la policía política, los colectivos o el apoyo al régimen de Nicolás Maduro. Desde su experiencia de 20 años en el exilio, Colina señaló que ha observado distintas etapas de éxodo masivo, desde ciudadanos comunes hasta líderes políticos perseguidos.
En el diálogo, se discutió también el amplio rechazo que ha surgido en varios países de América Latina hacia la migración venezolana, vinculado a la llegada de sectores sociales que no representan el típico perfil de oposición política. Además, se mencionó el conflicto político con Maduro y la posibilidad de que algunos migrantes sean utilizados como parte de un plan del régimen para exportar problemas de delincuencia común a otros países receptores. Se destacó la necesidad de abordar estos temas de manera franca y realista, evitando generalizaciones que perjudiquen a los venezolanos que han salido del país debido a la persecución política y la crisis económica.
Durante la conversación, se evidenció la preocupación de Colina por la falta de liderazgo político en Venezuela y la ambigüedad de algunos actores políticos en su postura frente a la situación. Asimismo, se criticó a líderes latinoamericanos, como Lula, Petro y López Obrador, por su aparente apoyo a Maduro, obviando las violaciones de los derechos humanos y la grave crisis generada por el régimen en Venezuela. Colina enfatizó que es fundamental distinguir entre aquellos que han sido perseguidos y han sufrido en manos del régimen y aquellos que formaron parte de la estructura criminal y represiva de Maduro.
La conversación también abordó la complejidad del régimen de Maduro, que se extiende a través de múltiples niveles y cuenta con operadores tanto dentro como fuera de la oposición. Se resaltó la responsabilidad de Maduro en la violencia política, los crímenes y la expulsión de millones de ciudadanos, y se mencionó el debate en la comunidad internacional sobre cómo abordar esta situación sin interlocutores confiables en Venezuela. Colina señaló que las Fuerzas Armadas venezolanas no son monolíticas y existen divisiones internas, lo que complica aún más la situación.
En resumen, la conversación con José Antonio Colina puso de manifiesto la complejidad y los desafíos relacionados con la migración venezolana hacia Estados Unidos, así como las divisiones y la falta de liderazgo político en Venezuela. La postura de Colina subraya la importancia de diferenciar entre los migrantes que han sido perseguidos y aquellos que formaron parte de la estructura del régimen de Maduro.
Es importante destacar que nuestras preocupaciones comunes nos acercan. Considero que los líderes venezolanos en el exilio tienen un peso especial y todos debemos encontrar formas de hacerles sentir que pueden ser una voz representativa. Es crucial mostrar al mundo que Venezuela también tiene otras opiniones que merecen ser escuchadas en defensa de los intereses de los venezolanos. A continuación, les presento parte de mi conversación con Colina, esperando que sea un aporte al debate y a la democracia. Mi esperanza es que los venezolanos en el exilio puedan llegar a un escenario en el que organicemos una comunidad unida y fuerte, capaz de influir en la opinión pública a favor de la libertad.
Una conversación franca con José Antonio Coilina
一Como director de Veppex, una organización bastante conocida a nivel internacional con relación a la migración, ¿coméntanos cuál es tu opinión acerca de los migrantes que llegan a Estados Unidos recientemente?
一Muchas gracias por la invitación. Bueno, primero que nada tengo que decir que los venezolanos que están llegando a Estados Unidos en una buena parte de ellos son personas que no merecen ingresar a territorio norteamericano. Una buena parte de ellos vienen de la policía política. Otros fueron parte de los colectivos. Hay otros que vienen huyendo de la crisis económica que ellos mismos generaron, apoyando un régimen como el de Nicolás Maduro.
Desde mi visión y los 20 años que tengo fuera de Venezuela, observo las diferentes etapas de éxodo masivo de los venezolanos, uno se da cuenta de que, al principio, hace 20 años atrás, llegaban ciudadanos comunes, salía el estudiante, salía la profesora, el ingeniero que protestaba y que lo perseguían, y ese fue el primero que salió al exilio, que fue básicamente cuando yo creé la organización que busca claramente ayudar a quienes han salido por persecución política o a otras latitudes. Después vimos un exilio que comenzó a generarse producto de la persecución a líderes políticos. Entonces, es cuando entra toda esta gente de Voluntad Popular y eso otro tanto porque han sido perseguidos y encarcelados y que salieron al exilio, fue una segunda etapa. Después salieron al exilio los chavistas originarios que estaban siendo perseguidos por Maduro porque entraron en discrepancia con él y se fueron de Venezuela y ahora está entrando la base que era chavista a los diferentes países.
Entonces, por supuesto, las razones que motivaron la creación de la organización en un principio se mantienen a veces dentro de un conflicto de competencia con los migrantes que vienen entrando ahora. Muchas veces me dicen que tenemos que ayudarlos a todos, y yo básicamente no estoy de acuerdo. Y no estoy de acuerdo porque muchas de esas personas han perseguido. De hecho, aquí hay policías y funcionarios del Sebin que están pidiendo algún tipo de beneficio migratorio y tienen víctimas entre la gente que vive aquí en Miami, y en todo Estados Unidos El consenso desde mi punto de vista es que representan un problema y los esfuerzos que hicimos al principio para que los venezolanos pudieran tener un trato migratorio más decente y acorde con la realidad que está viviendo Venezuela ahora, pues es un esfuerzo que lo estamos midiendo. porque tampoco queremos beneficiar a una cantidad de elementos que en el pasado torturaron, persiguieron, asesinaron y formaron parte de una revolución, que es lo que ha causado al máximo el éxodo masivo de los venezolanos.
一Hablando del tema migratorio y como consecuencia de lo que tú estás diciendo, recientemente leí en El Nacional que hay un amplio rechazo a la migración venezolana en muchos países de América Latina. Las estadísticas se basan en un estudio de las Naciones Unidas. Con relación a la migración que está llegando y que no parece representar el típico sector migratorio de composición política de oposición, debo decir que me pareció realmente bochornoso ver a algunas migrantes venezolanos que llegaron a un hotel en Nueva York patrocinado por el alcalde comportarse de una manera inadecuada, exigiendo un trato preferencial, que se les diera alojamiento, vivienda, comida, pero incluso todo gratis, cuando es bien conocido que aquí en Estados Unidos el resto de los venezolanos del exilio que hemos llegado nos hemos tenido que comer las verdes, trabajando de lo que sea para poder llevar el sustento al hogar, desde limpiar casas, tejados, piscinas, etc., pero además está la actitud altanera, bastante chabacana y muy mal educada.
Me pareció que eso no debía ser ni tiene porque ser reflejo de la migración venezolana, pero eso es lo que tenemos realmente. Además, está el conflicto político con Maduro, en donde él es el principal responsable de todo este desastre y no sabemos si incluso son ellos parte de un plan del régimen para dejar mal a los migrantes exportando parte del problema de delincuencia común de Venezuela a los otros países receptores. Entonces hablemos un poquito más respecto.
一Con respecto a lo último que estás diciendo para abordarlo, lo primero, bueno, está bien. Maduro es el responsable, pero es la base de Maduro la que está saliendo de Venezuela. Entonces, el hecho de que, por ejemplo, para colocar un ejemplo un poco extremo, pero para que se entienda el hecho de que Rafael Ramírez ahora critique a Maduro, no lo convierte en opositor.
Él es un delincuente y es un individuo que formó parte de la revolución, se robó el dinero del pueblo venezolano, entonces porque ahora critica a Maduro, lo vamos a recibir con los brazos abiertos en la oposición, como se ha hecho en otras oportunidades con Luisa Ortega Díaz y otros como Miguel Rodríguez Torres.
Eso no tiene ningún sentido para mí, el problema de los venezolanos, desde mi punto de vista, es que les cuesta fijar una posición clara y me refiero al liderazgo político de los que tienen voz y voto y son ambiguos. Les gusta decir lo políticamente correcto, no les gusta decir la realidad.
Lamentablemente por tener ese criterio es que en otros países han llegado elementos como los miembros del Tren de Aragua, que han ido a cometer delitos en países como Perú, Colombia, Chile y por los delitos que ellos cometen quieren catalogar a todos los venezolanos y han generado una reacción xenofóbica contra los venezolanos, porque ese tipo de personas ha llegado a esos países.
Entonces, por supuesto que yo nunca voy a estar de acuerdo con que elementos de esa calaña o de otra estructura criminal del régimen, por el hecho de que no se sientan bien con Maduro o sean víctimas de Maduro, entonces hay que buscarles un beneficio migratorio. La realidad es que eso nos afecta a nosotros como venezolano en el exilio, nos afecta a nosotros como nacionalidad, nos afecta como gentilicio, porque ese venezolano no es igual al venezolano que vivió hace 20 años.
Y con respecto a lo que estabas diciendo inicialmente, tanto Lula como Petro son unos grandes hipócritas. Esa es la realidad, porque ellos han querido lavarse la cara o están intentando lavarle la cara al régimen de Maduro. Hablan de que supuestamente todo lo que se ha dicho contra Maduro es falso, que es una narrativa, como lo dijo Lula da Silva, pero ellos obvian los hechos, por ejemplo, Petro tiene casi 1,5 millones de nuestros compatriotas en este momento en su territorio.
¿Y eso es producto de qué? Es consecuencia de que Venezuela está gobernada por Maduro. Ellos intentan venderlo como demócrata para que sea incluido en el sistema legal americano. Acaso la sola palabra de Lula hace que Maduro sea un demócrata, así lo acaba de decir en Brasil, que todo lo que sucede en Venezuela es una narrativa de actores internacionales, yo me pregunto ¿es una narrativa? ¿Los 7 millones de venezolanos que están fuera del país son una narrativa? ¿Los presos políticos que hay en cárceles en Venezuela son una narrativa? ¿La gente que ha muerto bajo la custodia del régimen a causa de su política es una narrativa? Entonces estos individuos, tanto Lula como Petro, como López Obrador, son unos grandes hipócritas que ponen la ideología por encima de la realidad.
Lo cierto es que ideológicamente su objetivo es hacer potable a Maduro porque es un aliado y les conviene ayudarlo porque pueden apoyarlos con la riqueza de Venezuela, lo demás no interesa. No importa cuántos venezolanos salgan del país, no importa cuántos venezolanos estén dentro de su territorio, generando una inestabilidad producto de Maduro, allí no importa que los aliados de Maduro sean Estados criminales como Irán, los narcotraficantes, los terroristas.
A estos gobernantes no les importa que Maduro sea una piedra angular en la desestabilización de América Latina. Lo que les interesa es que, hay que entenderse con Maduro porque biológicamente están del mismo lado, son unos grandes hipócritas y lamentablemente forman parte de la gran crisis que está viviendo el mundo en este momento. ¿por qué en Venezuela hay una gran crisis?, porque hay una crisis de liderazgo, no existen estadistas en este momento, no hay líderes políticos realmente confiables a nivel mundial, lo que hay son operadores políticos.
Y en América Latina una buena cantidad de operadores políticos provienen de una izquierda que desde mi punto de vista presenta un gran problema. Y hay un fenómeno que también hay que recalcar. Ahora los presidentes que son de derecha, supuestamente derecha, también quieren entenderse con Maduro, como el caso del recién electo presidente de Paraguay, que dijo que iba a restablecer relaciones con Venezuela, que no importaba los derechos humanos, pero que había que restablecer relaciones, lo cual me parece patético, porque Maduro es un tirano y esa es la calificación correcta y adecuada. Si algunas personas no lo quieren escuchar, no importa, pero esa es la calificación correcta. Es un tirano, es un violador de derechos humanos, que tiene serias investigaciones en la Corte Penal Internacional; pero además está acusado de narcotráfico, de lavado de dinero, estas acusaciones están en cortes internacionales, sobre todo aquí en Estados Unidos, y pende sobre él una recompensa por su cabeza. O sea, con esto quiero decir que Maduro es un delincuente y todo aquél que intente violar esta barrera se convierte en su cómplice. Lo sé, es mi punto de vista.
Tanto Lula como Petro, como López Obrador y otros más son unos grandes cómplices del gran tirano narcotraficante que tiene América Latina, que se llama Nicolás Maduro.
一Cuando hablamos de Maduro cuesta un poco entenderlo, porque Maduro es una superestructura, Su régimen gobierna en niveles. Cuando lo observas hablamos de cientos de miles, incluso millones de ciudadanos están de alguna forma vinculados con esa estructura, que incluso cuenta con operadores en la oposición, muy parecido a lo que existe en Cuba, Maduro es un actor que ha superado a Cuba en el tema de la violencia política por la cantidad de crímenes que ha cometido al punto que se ha hecho un dossier completo llevado a la Corte Penal Internacional. Probablemente de cada diez venezolanos que tú conozcas, hay uno que tenga una historia que contar sobre un hecho de violencia política del que ha sido testigo, Entonces, estadísticamente hablando, este sujeto es realmente in Leviatan, por ser responsable de tantos crímenes y la expulsión de millones de ciudadanos sin producir una guerra convencional. Esas son realidades. Y la comunidad internacional entonces en este momento está en una disyuntiva debate, porque al parecer no hay interlocutores en Venezuela que sean capaces de decirle al mundo que esto es lo que está pasando.
Maduro parece ser el sujeto que muestra tener el control de la Fuerza Armada prácticamente por completo, tú que vienes de ese sector militar sabes muy bien qué tipo de armamento dispone y quiénes son los que están detrás de todo esto, pues él tiene toda la asesoría de los rusos, Sí es necesario el financiamiento de los chinos, aunque no tanto como antes lo tenía Chávez.
一Quiero decirte algo antes que sigas avanzando, porque creo que está bastante interesante el punto, está muy bien Maduro, tiene el control supuestamente de la Fuerza Armada en la teoría, en la práctica no es la realidad. Las Fuerzas Armadas en Venezuela no son monolítica ni está todo al servicio de Nicolás Maduro, está completamente fragmentada y obedece a sus intereses delincuenciales, lo cual no la convierte en un elemento monolítico como tal.
De hecho, hay serias divisiones y diferencias internamente. Aquí el gran problema ha sido y es, por eso hay una confusión a la comunidad internacional, es que los actores que están llamados a ser los interlocutores, los que están llamados a ser los receptores, los que están llamados a describir el problema y buscar la forma de solucionarlo, son los actores políticos, pero ellos están completamente divorciados de la realidad. Los actores políticos en Venezuela son tan mediocres que dilapidan el apoyo internacional, son tan anodinos que la cantidad de dinero que les dieron para la defensa y recuperación de la democracia, que fue una cantidad importante de dinero, se la robaron y es allí donde la comunidad internacional se confunde, es allí donde la comunidad internacional no sabe qué hacer.
Es allí donde esta gente dice, bueno, ¿con quién nos entendemos? No va a ser con Maduro, que es un dictador, pero si lo que tenemos del otro lado en la oposición venezolana es un grupo de delincuentes que se está matando entre ellos para ver quién roba más, entonces no tiene sentido. Es mi opinión que, si en Venezuela existiera una oposición realmente calificada y comprometida con el sentido histórico que devenga una circunstancia como la de Venezuela, aquí el resultado fuera otro.
De paso, que tenemos una cantidad de políticos en Venezuela y fuera de ella, con un total desconocimiento del estamento militar, desconocimiento que los lleva inclusive a pensar que pueden salir de Maduro sin apoyo de los militares. Los lleva a pensar que puede gobernar a Venezuela sin la presencia de los militares, lo cual es completamente imposible. Entonces el gran problema es que una parte de las Fuerzas Armadas han apoyado a Nicolás Maduro y al régimen de Chávez, pero hay otra que no lo apoya, que tiene un porcentaje importante, pero que no ha encontrado realmente, al igual que la comunidad internacional, un interlocutor en la esfera del frente político en la oposición para poder articularse, para poder derrotar al régimen de Maduro. Así que, desde mi punto de vista, el gran problema en Venezuela es la traición de los políticos de la oposición, porque así lo calificó. Es una traición porque han tenido el apoyo, han tenido los recursos (el dinero) y han tenido el reconocimiento de un sector importante de la comunidad internacional y no supieron hacer absolutamente nada.
Lo que hicieron fue alimentar sus egos, sus arcas; alimentar la participación de sus clubes políticos, Por qué a eso no se le puede llamar partidos políticos, sino clubes políticos. Y ahí está el problema, desde mi punto de vista.
Estimados lectores, hasta aquí les presento la transcripción parcial de mi conversación con Colina. Sin embargo, hay más contenido disponible en el video adjunto, donde podrán encontrar respuestas a mis inquietudes. Durante el resto del video, Colina abordó diversos temas. Por ejemplo, al ser consultado acerca de los diputados de la Asamblea Nacional de 2015, expresó su preocupación: «Esos diputados se apropiaron del dinero destinado a la libertad del pueblo venezolano». También compartió su opinión sobre Juan Guaidó: «Cuando se le preguntó cómo se sustentaba, parecía Cantinflas. No pudo dar una respuesta adecuada, ya que no puede afirmar que su desempeño durante el gobierno interino haya sido honesto». Al indagar sobre su perspectiva para remover a Maduro y restablecer la democracia en Venezuela, declaró: «La única forma de poner fin a Maduro es a través del uso de la fuerza, y lamentablemente, en este momento carecemos de ella. Si no, pregúntenle a Henrique Capriles, quien fue agredido por cuatro mujeres delincuentes chavistas y expulsado de la ciudad a golpes». Les invito a ver el video completo para obtener más detalles sobre estas cuestiones.
Fue realmente gratificante tener este contacto con un compatriota y escuchar su sinceridad al llamar las cosas por su nombre. Esto me lleva a reflexionar sobre cuánto tiempo más los venezolanos seguiremos mostrando una cara falsa mientras ocultamos nuestro verdadero rostro.
Nos leemos hasta una próxima ocasión en El Nacional.
@estebanoria