Comenzó la semana con la confirmación hecha por Guaidó de lo que ya se venía evidenciando, el fracaso del esquema de Oslo, dado el boicot de la representación del gobierno de Maduro, pero esta vez la noticia vino acompañada de una nueva argucia del oficialismo como es la de sacar a la luz pública una nueva propuesta llamada diálogo nacional.
Se juntaron entonces el hambre con las ganas de comer. Mientras el gobierno de Maduro utilizó distintos argumentos traídos por los pelos para no responder a los temas que estaban sobre la mesa en Oslo con argumentos falaces (las sanciones, el Esequibo otrora por ellos entregado, etc.), venían tejiendo la entente con un grupo variopinto de dirigentes “opositores” de distinto pelaje y cuestionable trayectoria (véase la foto) cuya preocupación fundamental ha sido buscar el protagonismo que la realidad les ha negado, minorías invisibles.
Por allí venían los tiros. Héctor Rodríguez recientemente declaró que en Venezuela existen varias oposiciones y que los que acudieron al proceso de Oslo y Barbados, en el que participó como negociador del Palacio de Miraflores, eran representantes de una oposición subordinada a los intereses de Estados Unidos.
Los de Tamos o Todos Unidos también habían estado muy activos en tratar de demostrar que era necesario darle una distinta vuelta a la negociación política, argumentando por la urgencia de darle respuesta a las graves necesidades de la población venezolana.
Mientras tantas cosas se declararon, venían pactando ellos solos, sin siquiera necesitar de Zapatero
Algunos acuerdos han sido anunciados por Timoteo Zambrano, uno de sus voceros más destacados. Llama la atención que sea él quien anuncie que el PSUV regresa a la AN, al no ser, al menos oficialmente, ni militante ni dirigente de ese partido. La intención no declarada es la de sumar sus votos a los de los diputados pertenecientes a esta oposición para tomar el control del Parlamento y por supuesto impedir la reelección de Guaidó como presidente.
Anuncia la designación de un nuevo CNE en un breve plazo, no se sabe para qué elecciones
Muchos otros anuncios demagógicos como canje de petróleo por comida y medicina y defensa del Esequibo, justamente en alianza con quienes han sido los causantes de todo lo que se proponen resolver
Por lo pronto, tuvieron su primer fracaso como fue el retiro de los embajadores de la Unión Europea del acto de constitución en la Casa Amarilla al cual acudieron engañados. Todo anuncia que no van a tener el reconocimiento internacional, así lo hizo saber ya la representante de la Unión Europea Federica Mogherini, no tienen la representatividad en la que ella insiste, así como en la convocatoria a elecciones presidenciales creíbles.
Tampoco tendrán el reconocimiento nacional porque son dirigentes sin tropa, desgastados, muchos de ellos de dudoso prestigio Pero dirán ellos que para qué se necesitan mayores méritos ni apoyos, sin los cuales Maduro se ha mantenido en el poder.
A pesar de esta lamentable actuación que muestra la peor cara de la política al ser cómplices del golpe final del fracaso de la tan esperada salida para el país que se negociaba en Oslo, la política, la seria, la que busca verdaderas salidas continuará guiada por Juan Guaidó, que cuenta con el respaldo nacional e internacional para ello y que ha mostrado capacidad de liderazgo y entrega.
Los diputados del PSUV no regresaron este martes 17 a sus curules de la AN, como habían anunciado. No se informó la fecha en la que se comenzarán a liberar a los presos políticos. Así que no hay mucho que esperar de este espectáculo de pigmeos.