A pesar de producir más alimentos que en ningún otro momento de la historia, ahora mismo, contamos con la elevada y preocupante cifra de 820 millones de hambrientos en el mundo. De los casi 8.000 millones personas del planeta, 10% pasa hambre, 30% no accede a una alimentación suficiente y adecuada y 20% o más es obesa.

Además de los fuertes embates del cambio climático, la pandemia ha desatado la más compleja crisis económica y social de la humanidad de las últimas décadas. Ninguna otra región del planeta ha sido golpeada con tanta fuerza como América Latina y el Caribe, generando así mayor presión sobre los sistemas agroalimentarios afectando todo lo relacionado a la alimentación, ya que es un derecho humano, una necesidad vital y se encuentra vinculada a la economía familiar.

Según el informe de la FAO, El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo (SOFI, por sus siglas en inglés), el hambre mundial empeoró en 2020 a nivel mundial. América Latina y el Caribe sufrieron un importante retroceso de los indicadores relacionados con la alimentación y nutrición. 9,1% de la población total de la región padece hambre, un aumento de 2 puntos porcentuales entre 2019 y 2020. Según la Cepal, en el 2020 esta región experimentó una caída del PIB de 6,8%, la peor contracción de la actividad económica en 120 años.

Somos una región con una alta desigualdad y enormes brechas que atender. Un tercio de nuestros suelos está degradado y la mitad de las pesquerías están sobre explotadas. También porque los mercados y consumidores son cada vez son más exigentes en la producción sostenible de los alimentos, entre otros desafíos. Al mismo tiempo, esta región cuenta con los recursos humanos y naturales necesarios para revertir esta situación y alcanzar la Agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030. La agricultura, la ganadería y la pesca representan un motor para el crecimiento económico, y dentro de ellas la agricultura familiar tiene un papel fundamental como estrategia de inclusión económica y social.

Muchos de los problemas a los que hacemos frente hoy, son el producto de años de uso indiscriminado de los recursos naturales,poca consciencia de reciclaje y conservación, y mucha contaminación. Este escenario adverso nos ha obligado a repensarnos: ¿qué estamos haciendo?, ¿cómo estamos produciendo nuestros alimentos?, ¿a qué costo ambiental?, ¿cuántas enfermedades nos estamos generando por nuestros hábitos de alimentación?

Desde la FAO a nivel global y regional estamos planteando que es necesaria la transformación de los sistemas agroalimentarios para que sean más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles. Esto lo queremos hacer a través de las 3 iniciativas regionales (Sistemas alimentarios sostenibles a fin de proporcionar dietas saludables para todas y todos; Sociedades rurales prósperas e inclusivas; y Agricultura sostenible y resiliente). Creemos que esta trasformación se puede lograr a través de cuatro “mejoras”, que conforman nuestro nuevo Marco Estratégico 2022-31: Mejor Producción, Mejor Nutrición, Mejor Medioambiente, y una Vida Mejor.

Promover sistemas agroalimentarios más cercanos a las necesidades de todas y todos requiere el esfuerzo, la dedicación y la consciencia de todos los sectores de la sociedad. Por esta razón, del 28 de marzo al 1 de abril se estará llevando a cabo el 37 período de sesiones de la Conferencia Regional de la FAO para América Latina y el Caribe (LARC37), la cual se celebra cada dos años, siendo un espacio de construcción multisectoriales para trazar el camino y las acciones de la región hacia el combate del hambre y un futuro sostenible.

Durante la LARC37 los gobiernos de los 33 países miembros fijarán las prioridades de la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, y buscarán soluciones comunes a los grandes desafíos de la alimentación, la agricultura y el cambio climático en la región. Además, revisarán y orientarán a la organización para así estar a la altura de los desafíos regionales logrando mayor transparencia, receptividad, agilidad, eficacia e innovación.

El mundo afronta mayores amenazas, demanda que actuemos sin demora a fin de salvaguardar la vida, transformar nuestros sistemas agroalimentarios preparando nuestro planeta para el futuro y asegurando resultados sostenibles.

Ustedes podrán seguir este evento a través de la página web de la FAO en América Latina y el Caribe https://www.fao.org/events/detail/larc37/es.

 


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