La abstención es una decisión voluntaria, legal y coherente que tomaría cualquier ciudadano sensato que conozca la situación actual del país y se niegue a legitimar y reconocer tanto al régimen como a la asamblea nacional constituyente. Abstenerse es el deber ser, es lo moral y político correcto ante un sistema viciado y fraudulento como lo es el CNE, ante unas elecciones convocadas por la ANC ilegítima y ante unos candidatos que luego de resultar electos tendrán que subordinarse a esta para poder ejercer sus funciones, pues de lo contrario serán destituidos.
Abstenerse es darle un golpe a la dictadura, es sinónimo de rechazo y desobediencia al sistema MUD-PSUV, es desconocer a la izquierda y darle una bofetada, es el primer gran paso para obtener una verdadera victoria, es sublevarnos y no permitir que nos humillen y nos sometan, es impedir ser pisoteados por la izquierda, es aplicarle la ley de la ventaja a la MUD-PSUV, es rebelarnos ante la dictadura, es desmantelar esta falsa democracia y demostrar ante el mundo lo que verdaderamente son: una narcodictadura.
Votar en democracia es una excelente herramienta, pero en dictadura es un arma de doble filo, es un puñal de traición al pueblo venezolano y es moralmente ilegítimo porque usted verdaderamente no será quien elige, el poder estará concentrado en el tirano y los gobernadores serán una simple figura, una apariencia, unos lacayos que se prestaron para el régimen y ni funciones por sí solos podrán ejercer. Los comicios regionales no solo son una burla para el pueblo y los caídos que aclamaban libertad, sino que también son una estrategia impuesta por el régimen y auspiciada por la MUD para hacerle ver al mundo una falsa democracia y por supuesto para darle carácter legal, legítimo y hasta moral a los actos ejecutados por la dictadura por muy crueles que sean y sin importarles las verdaderas carencias por las que esté pasando la ciudadanía.
No hay elecciones bajo chantajes, manipulaciones y amenazas, no hay espacios por ceder cuando todos se han perdido o han sido otorgados al régimen por la MUD, no hay salida electoral cuando un voto es un acto de legitimación al régimen y no hay salida viable con esta “oposición” que rechaza, denigra y hasta tilda de divisionistas a quienes tenemos la razón, para ellos seguir compartiendo espacios con sus camaradas del régimen y embaucando a un pueblo desesperado que ha sido llevado por ellos bajo la sumisión al adoctrinamiento y la cohabitación a la convivencia con la postura más perversa jamás vista en Venezuela. No podemos avanzar bajo las órdenes de “líderes” falsos que promueven una falsa oposición, ni mucho con el llamado de politiqueros que pretenden hacer política cuando hay una crisis que nos lleva por delante y la única “solución” que plantean es volver a lo mismo, volver a votar para legitimar y dar estadía al régimen sin importar que la agonía de Venezuela se alargue y la izquierda continúe perpetrándose en el poder.
Quizá este escrito los haga enojar, pero son verdades que no me puedo guardar y mentirles va contra mi moral, así que si usted vota y durante el período por el cual usted eligió a un narcogobernador todo sigue igual o incluso empeora, no lo llame dictadura porque recuerde que usted hoy está legitimando una “democracia” y juega con el sentimiento y desespero de todo un país al que le urge un cambio y desea con anhelo un gritar ¡libertad!