Estimado presidente Zapatero:

Espero que esta carta le encuentre en buen estado de salud y en buena disposición para recibir mis palabras. Permítame comenzar recordándole nuestra última reunión, que tuvo lugar hace cinco meses en Madrid, donde tuve la oportunidad de solicitar su valiosa intervención en un asunto de vital importancia. En aquel entonces le pedí que intercediera por el caso del hijo del general Raúl Isaías Baduel, el joven Adolfo Baduel, quien ha sufrido una injusticia incomprensible.

Adolfo Baduel, además de presenciar la trágica muerte de su padre en la misma celda, lleva casi cuatro años tras las rejas. Esta situación es una inmoralidad que clama al cielo y que no puede ser ignorada.

Desde aquel encuentro, he viajado dos veces más a España con el objetivo de verle y continuar abogando por la liberación de este joven injustamente encarcelado. Lamentablemente no he tenido éxito, aun cuando usted siempre ha contestado mis mensajes sobre este particular.

Como usted bien sabe, el general Baduel era un amigo cercano y su caso me toca profundamente. Por eso pedí a Timoteo Zambrano, en reiteradas oportunidades, hacer posible el encuentro con usted para conseguir la liberación del hijo del general.

Le escribo en esta ocasión para rogarle que utilice su influencia y contactos tanto en el gobierno de Maduro como en la comunidad internacional, con el fin de lograr un gesto humanitario hacia Adolfo Baduel. Agradezco sinceramente sus gestiones pasadas en favor de otros presos políticos en Venezuela, pues yo mismo fui beneficiado por ellas. He reconocido esto públicamente en varios escenarios.

Es fundamental recordar que nadie debe estar privado de su libertad únicamente por pensar de manera distinta o por ejercer su derecho a la libre expresión. La libertad de pensamiento y el respeto a los derechos humanos son principios fundamentales que deben ser defendidos y promovidos en todo momento.

Confío en que su liderazgo permitirán  persuadir a las autoridades de Venezuela, para que Adolfo Baduel recupere su libertad y pueda reencontrarse con su familia. Estoy seguro de que su intervención puede ser crucial para lograr una solución humanitaria y justa.

El hijo de Baduel tiene un grave problema de salud y necesita recuperarse física y mentalmente de esta tragedia. Su liberación es un gesto positivo que el gobierno de Maduro puede hacer.

Le agradezco profundamente su atención y su dedicación a esta causa.

Con mi más sincero agradecimiento y respeto,

Leocenis García

Presidente de Prociudadanos


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