Los venezolanos estamos llegando al llegadero con la mente clara.
La dignidad dentro y fuera del país ha decidido frenar a la dictadura madurista impuesta por la canallada castrista.
Las puertas deben estar abiertas para que, una vez se conozca el triunfo de la señora María Corina Machado, se proponga un gobierno en el cual figuras del chavismo acepten posiciones de gobierno del más alto nivel, junto con representantes de otros partidos, a fin de que el país comience una etapa de transición que nos renueve la tradición de progreso en convivencia, tan esencial para la reconstrucción del país.
La señora Machado va a ser elegida por la integridad venezolana en contienda electoral democrática contra el candidato del chavismo, que no puede ser madurista porque el madurismo está muerto. Si el chavismo no puede nombrar un candidato propio, del verdadero chavismo, si solo puede nombrar a un madurista, entonces Venezuela está bajo el yugo de los militares de La Habana.
Así, los venezolanos viejos solo podemos ver lo que van a hacer los menos viejos.