Durante más de dos décadas, una parte creciente de venezolanos ha soñado con un cambio de sistema de vida; en una gran transformación liberadora de cadenas y de la opresión.
Por más de 20 años una mafia política y sus secuaces han controlado las decisiones del poder y no han cedido el liderazgo a pesar de sus continuos y muy evidentes fracasos y corruptelas.
Una y otra vez hemos visto los enfoques de los mismos actores diciendo qué hacer y cómo hacerlo, y ver como en esa misma cantidad de veces han fracasado y han sumido a la nación en una profunda desesperanza.
También hay ciertos elementos que han querido boicotear cualquier tipo de resistencia; que han negociado a espalda de la gente y que han retrasado la caída de la tiranía, transmutándose en parte del problema.
Ellos llamaron radical a María Corina Machado, trataron de aislarla, ofenderla y minimizarla. Son los mismos que no hicieron nada por defender a la ciudadanía de la opresión chavista y, cuando otros tomaban la iniciativa, los trataban de aplastar en la opinión pública.
Son obstáculos que siempre han existido en el camino hacia la libertad, y los primeros que hoy María Corina Machado debe derrotar y así encausarlos en una nueva dinámica política que sí le permita a la oposición acceder al poder.
María Corina Machado es la representante de una nueva era para Venezuela, una donde los defraudadores de todos los colores queden derrotados, una donde ser radicalmente sinceros y leales no sea criticado ni vilipendiado, un futuro donde la libertad sea una realidad.
Sí, el camino para lograr esto no será fácil; sin embargo, la ruta está bastante clara para lograrlo. En estos momentos –tanto los más conspicuos colaboracionistas como los propios usurpadores de Miraflores se encuentran débiles– y es la oportunidad para que el liderazgo de María Corina irrumpa y se haga el cambio positivo que el país anhela.
Esta no es una vana ilusión, sino una posibilidad cada vez más real y realizable; pues, Nicolás Maduro a duras penas si llega a 10% en la encuesta más optimista para él, y quienes le siguen la corriente desde otras trincheras no llegan ni a 5% de las opiniones de los venezolanos.
Es por ello que solo una figura libre de ataduras, de dogmatismos, de intrigas, de corruptelas y de mezquindades puede enrumbar al país hacia una nueva realidad y esa persona es ella, María Corina Machado.
Por tal razón, hoy la acompañamos en este camino a la libertad, un camino que tiene varias paradas. La primera, lograr condiciones en las primarias; la segunda, concretar el triunfo en las internas; posteriormente, reunir a todo el país detrás de María Corina Machado; después ganar las Presidenciales de 2024 y por último, instaurar un gobierno liberal, democrático, constitucional y de salvación nacional.
El camino a la libertad, al final, será un logro de todos juntos con María Corina Machado.
Así de simple.
Sin más que agregar, nos leemos la próxima semana.