En este texto expositivo se tratarán tres aspectos que, aunque parecieran desligados y dispersos, están estrechamente interrelacionados. Todos ellos en plena convergencia con la defensa de la célula fundamental de la sociedad, como lo representa el núcleo familiar tradicional, y sobre la cual todas las instituciones a través de sus legítimos representantes están en la obligación de fijar con más  prioridad que nunca su principal foco de atención, actuación y defensa. A propósito valga hacer la invitación para presenciar la conversación a favor de la defensa de la familia universitaria por parte de la Intergremial  UNET, a realizarse en el programa Salve María Auxiliadora: trasmisión por el Canal 21 (San Cristóbal, Venezuela), este próximo domingo 23-07-2022 (9:00 am y 8:00 pm). Ver a través de:  https://canal21tachira.com/ o https://acortar.link/Z0n16V

En esencia el conocimiento científico es innovador, educativo y pro-familia  

Empezando por el contexto mundial, que se proyecta con crudeza en  nuestra realidad venezolana, coexisten un conjunto de tendencias, todas ellas deliberadamente articuladas, que tienen como misión la destrucción de las bases morales y espirituales (principalmente de la sociedad occidental), y en concreto destruir la célula fundamental de la sociedad representada por la familia tradicional (acorde a la ley moral y orden natural).

Y para lograr este propósito se ha empleado la economía como esencia misma de la naturaleza humana, para socavar los pilares claves como vienen representadas por la religión y la espiritualidad, fundamentadas en la  milenaria base moral, religiosa y espiritual concordante con los procesos de enseñanza y aprendizaje afines al catolicismo: cuya mayoría de feligreses  abarca de manera aproximada para el caso venezolano, el 80% de la población que la profesa. Además este contexto se caracteriza por un escenario donde las “Tecnologías de la Información y Comunicación” se emplean de manera anti educativa, de forma perversa, para manipular al individuo.

Por tanto sería un craso error universitario darle la espalda a este fenómeno constituido por varias aristas, entre ellas la económica y por su puesto la educativa, donde por Norma (Artículos 2 y 3 de la Ley de Universidades por ejemplo) estamos obligados los profesores universitarios a través de sus tres funciones esenciales e integradas (docencia, investigación y extensión),  a proponer soluciones a través del conocimiento científico.

Recalcando a su vez que todo conocimiento científico es de manera innata innovador y educativo, independientemente de la disciplina científica que se trate. ¿O es que acaso el conocimiento científico por parte del físico Albert Einstein generado en su Teoría de la Relatividad o del Dr. Jacinto Convit García en su logro relacionado con la  vacuna contra la lepra pudieron haber sido rechazados como proyectos, por ser considerados como no innovadores y nada educativos según los criterios rígidos  de algún programa de doctorado?

Por otra parte, afincados en el precepto normativo acerca de que la “universidad es fundamentalmente una comunidad de intereses espirituales en la tarea de buscar la verdad y afianzar los valores trascendentales”, es preciso que todos nos aboquemos, desde diferentes disciplinas científicas, a la “satisfacción de las necesidades espirituales”. En primer lugar porque cuando estamos en el proceso de socialización con nuestros estudiantes o en actividades de extensión con miembros de distintas comunidades de la sociedad (a quienes nos debemos), es de trascendencia, dentro de un ámbito constructivista como el enunciado por Jean Piaget, proceder  ante todo a conocer y cubrir las necesidades de orden espiritual (consustanciadas con sus conocimientos previos), de manera que el proceso de enseñanza y aprendizaje realmente sea efectivo, pertinente y sustentable. Asimismo,  efectivamente todo el aparato económico de la humanidad se mueve con el fin satisfacer necesidades de tipo material,  sin tomar en cuenta la verdadera felicidad que se sustenta en lo espiritual. (Referencia: Carta al Comité Académico de una Universidad del Estado Táchira, julio 2023)

Acoso moral, espiritual y físico a la familia

Hoy en día, cuando evidentemente existe un plan globalista con el nefasto propósito de reducir drásticamente la población mundial y desintegrar o destruir la familia tradicional fundamentada en los principios morales, religiosos y espirituales del cristianismo, con una postura radical y sin tibios  eufemismos, aquí lo que está en juego es la vida de la familia de los trabajadores decentes que dependemos de un salario fijo transformado en “inconstitucional”, por lo que obliga a llamar las cosas como lo que son: el que no ha logrado frenar el flagelo inflacionista es un incapaz, y quien no decreta el pago de un salario mínimo vital (tal cual lo establecido en el artículo 91 de la Constitución), en una época donde la muerte amenaza a cada instante por no disponer de recursos para cubrir los nutrientes requeridos, proteger la salud y salvaguardar la vida, ciertamente es… (Cada quien póngale el calificativo que mejor considere y favor hacerlo llegar al número o correo de contacto). Porque ciertamente somos víctimas de los embates de una sindemia que tiene una necrológica premeditada, que se afinca malévolamente en un genocidio «selectivo», que consiste en menospreciar, deteriorar, humillar, desplazar, “exterminar” y reemplazar progresivamente (en el plano mental, moral, emocional, espiritual y físico) a ciertos grupos sociales por una parte vulnerables o por otro lado de vital importancia estratégica.

Sustitución que se ha venido plasmando en  diferentes estados de vulnerabilidad crónica, debido a la condición de carecer de los recursos mínimos necesarios para la alimentación balanceada, la salud integral y por tanto la vida. De una parte, los severos niveles de desnutrición que hacen exponer con inmensa fragilidad y alta probabilidad de ocurrencia, el hecho cierto de contraer cualquier tipo de enfermedad o de agravar una preexistente, y como repercusión inmediata un inminente desenlace fatal.

“Aviso” para neutralizar y vencer el acoso a la familia

El “Aviso” es un evento que ha sido profetizado desde hace cinco siglos. El primero que habló de ello fue un jesuita de nombre San Edmundo Campion (1540-1581), luego otros místicos y santos han disertado sobre este evento llamado en el ámbito católico como “día de la iluminación de las conciencias”, “día de luz” o “juicio pequeño”. Asimismo, varias  mariofanias o apariciones marianas han anunciado este suceso de orden sobrenatural (por ejemplo en las apariciones de Nuestra Señora del Carmen de Garabandal en el periodo 1961-1965), donde se recalca el último esfuerzo de la “Santísima Trinidad” y su “Sagrado Cielo” para la conversión de la humanidad. Sea oportuno recordar algunas declaraciones de la vidente Conchita González (1965) con respecto al “Aviso”:

“El Aviso es algo que viene directamente de Dios y podrá verse en todo el mundo, dondequiera que uno esté. Será como una revelación de nuestros pecados, y será visto y experimentado tanto por creyentes como por no creyentes y por personas de todas las religiones. Es como una purificación para prepararse para el Milagro. Es también una especie de catástrofe. Hará que pensemos en los muertos, es decir, que preferiremos estar muertos antes que experimentar la vivencia del Aviso. Es imposible que el mundo esté tan endurecido que no cambie” (Referencia: Our Lady Comes to Garabandal, por Joseph A. Pelletier, A.A., pp. 148-149

El “Aviso” representará  un sublime acto  de carácter único y extraordinario en toda la historia del género humano, que bajo  el cobijo de la misericordia y justicia divina, se activará un fenómeno de origen cósmico que irrumpirá sobre cada persona, posibilitando bajo estas circunstancias la valoración del estado de nuestra alma a la usanza como la valora Dios.

De esta forma se tendrá entonces la oportunidad única de atestiguar cada quien por sí mismo  lo bueno y  malo que ha hecho, así como lo bueno que se ha  dejado de hacer (como un espejo genuino de nuestros pecados que se traducirá en un juicio muy personal y aún con vida terrenal), y esto incluye las mezquindades, malos pensamientos y procederes desleales destinados a impedir que el Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de la Virgen María puedan manifestarse a través de los dones y frutos del Espíritu Santo (satisfaciendo de esta forma las verdaderas necesidades espirituales consustanciadas en el Tratado de Grignion de Montfort, que algunos científicos y no-científicos se niegan a conocer y aceptar)  y así cumplirse la Divina Voluntad del Padrenuestro que se plasman por ejemplo en las Bienaventuranzas (Mateo 5:3-12 o Lucas 6:20-23)

Indudablemente, así existan personas que vivan con una visión de aldea, atrapadas además en el síndrome del conocimiento particular y negando lo que ignora o desconoce así también sea conocimiento incluso científico, el mundo en términos generales está en una gran confusión, padeciendo de una desorientación diabólica y con una conciencia mundana totalmente oscurecida por el pecado, entregada a falsos dioses y perdida en el laberinto sin salida de las falsas filosofías y nuevas creencias. Así que Dios en su infinita misericordia permitirá que todo ser humano, bueno y malo, rico y pobre, creyente e  incrédulo, de cualquier edad, desde el niño hasta el anciano,  pueda ver el estado o estatus de su alma para de esta manera hacer una corrección de su conciencia, para que por fin se deje de pecar, convertirse de corazón, y seguir a Cristo y al Evangelio a través de la mediación de la  Virgen María.

No obstante, el “Aviso” va a traer como consecuencia que el bueno se santifique más y que el malo, si no se convierte, peque mucho más, es decir, existirá una radicalización del bien y del mal (tristemente no todos se convertirán). También es preciso recordar que está profetizado el “Aviso-Milagro-Castigo”, por lo que es un hecho latente y evidente que el castigo no se evitará, pero lo que sí puede ocurrir es que el castigo sea aminorado en duración y en intensidad. Porque tendría que haber una conversión extraordinaria de todos los seres humanos tanto en lo cualitativo como cuantitativo para que Dios cambie sus planes de justicia, pero de lo que será verídico es que se producirá una purificación en pleno… por lo que los planes perversos para este agosto y octubre en contra de nuestras Sagradas Escrituras y por ende de la Iglesia Católica serán neutralizados y vencidos, porque al final el “Inmaculado Corazón de la Virgen María vencerá”.

Fuente: “Perspectiva Económica y Académica Contemporánea”. UNET. Años: 2018 a 2023.      Pedro Morales. Postulante a Rector de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET)

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