El reciente intercambio de personas detenidas realizado el pasado 20 de diciembre ha generado una serie de opiniones antagónicas, algunas de las cuales analistas políticos consideran como fuera de lugar e irrespetuosas con las personas que han negociado esas liberaciones. Sobre todo es preocupante lo que compete al grupo de personalidades que forman parte de la mesa de diálogo y que han logrado resultados evidentes con base en los acuerdos sostenidos.
Es necesario destacar que en ese diálogo participaron representantes de otros países, lo que ha permitido levantar sanciones, mayores garantías de apertura política hacia la candidata opositora, así como a los demás actores políticos opositores y la liberación de 24 detenidos en el canje por el señor Saab y sostener la esperanza de lograr otras liberaciones en el tiempo por venir.
Es difícil lograr consenso, así como los acuerdos esenciales en las decisiones políticas que requiere con urgencia el país, para lograr salidas a la profunda crisis política, social y económica que nos envuelve.
Esperemos que el Espíritu de la Navidad nos traiga esas opciones que nos permitan ir avanzando en lograr un clima de paz y esperanza para que todos los venezolanos podamos disfrutar de un país lleno de riquezas naturales y donde la tolerancia política fortalezca la democracia y los derechos ciudadanos.