Lenín Moreno, presidente de Ecuador, dio un discurso en la Asamblea General de la Organización de Las Naciones Unidas (ONU) el 25 de septiembre en defensa del sistema democrático en América Latina, con especial énfasis en Venezuela.
En su intervención, citó al cubano José Martí: «Cuando un pueblo emigra, sus gobernantes sobran. Sobran aquellos que se perpetúan en el poder y se vuelven gobiernos sombríos, siniestros, con mafias corruptas».
Moreno agregó que la migración de un pueblo no se realiza por voluntad propia, »lo hacen porque se ven obligados al desarraigo, y a un doloroso desmembramiento familiar y emocional», explicó.
También indicó las cifras aproximadas de la migración venezolana, la que calificó como «la mayor diáspora de la historia del continente», hacia su país y describió las condiciones en las que arriban al territorio. «Estamos recibiendo a 6.000 venezolanos a diario, mujeres embarazadas y niños. Los niños llegan con sarampión, con difteria, con poliomielitis. Hemos entregado más de 50.000 vacunas para los niños y chequeos a más de 1.000.000 de venezolanos”.
El presidente ecuatoriano recalcó en una resolución de la crisis venezolanas con un diálogo nacional «franco e inclusivo». Además, puntualizó la relevancia de la acción continental para encontrar una solución estructural a los problemas, pues es imprescindible que no se queden solo en declaraciones diplomáticas.
“A propósito de la crisis venezolana, o la que vive Nicaragua, nuestra América Latina tiene el gran desafío de consolidar su democracia, luego de que varios países vivimos gobiernos autoritarios, corruptos y populistas”, sostuvo el mandatario colombiano.