La Organización de las Naciones Unidas arremetió este lunes contra el Código Penal de Cuba. También contra las figuras de desacato, desórdenes judiciales, así como peligrosidad social y atentado.
En un informe aseguró que esos aspectos son sumamente vagos y carecen de la exigencia de precisión necesaria para ofrecer certeza legal a la población.
La nueva resolución del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de esa instancia responde a una queja expuesta por Cuban Prisoners Defender por la detención de los activistas Josiel Guía Piloto, Iván Amaro Hidalgo y Marbel Mendoza.
Cuban Prisoners Defenders es un grupo independiente de análisis, estudio y acción jurídica.
La ONG cuenta con la colaboración de los grupos disidentes de la isla y los familiares de los presos políticos. Su fin es recabar información y promocionar la libertad de todos los presos políticos. También busca promover los derechos humanos en la isla.
La ONU afirmó que los tipos penales por los que terminaron juzgados esos tres presos políticos quebrantan las obligaciones internacionales de Cuba. Un escenario que lo inválida como base jurídica del arresto e imposibilita invocar el fundamento legal para justificar la detención.
Detenciones arbitrarias
Resalta que las autoridades han utilizado el código penal de Cuba para aplicar en los últimos años detenciones arbitrarias sistemáticas contra opositores.
En esa misma línea, recordó que la CIDH ha reconocido que la isla usa esas detenciones como método de hostigamiento contra organizaciones políticas de la oposición, como la Unión Patriótica de Cuba.
Las personas apresadas terminan acusadas por desorden público, peligrosidad social pre delictiva y desacato. Además, reciben amenazas, agresiones, malos tratos y el acceso a la atención médica sería restringida en el interior de los centros de reclusión.
La ONU indicó que Guía Piloto, Mendoza Reyes y Amaro Hidalgo deben ser liberados de inmediato e incluso indemnizados o algún otro tipo de reparación conforme al derecho internacional.
A su vez, Prisoners Defenders señaló que para encontrar una solución a esa situación es necesaria la auditoría en los casos de los presos políticos. De lo contrario, el régimen de Cuba solo continuará aislándose.
La ONG también recordó que Cuba, con 90.300 presos, es el primer país del mundo en tasa per cápita. Además, 8.300 de ellos se encuentran detenidos sin delito alguno y 130 son considerados presos políticos.
Casos
Guia Piloto, presidente del Partido Republicano de Cuba, fue detenido el 1° de diciembre de 2016 por reclamar elecciones libres.
La justicia cubana lo sentenció el 8 de agosto de 2017 a cinco años de prisión por delitos de desorden público y desacato. Ya había sufrido con anterioridad el hostigamiento y represión del régimen por su filiación política.
Su negativa de dejar de hacer actividades pacíficas para pedir comicios independientes en la isla originó que también terminara arrestado en 2011 y 2014.
Amaro Hidalgo, activista cubano, cumple una condena de tres años de prisión desde el 13 de agosto de 2016 por delitos de atentado y desacato por llevar una camisa que decía «Democracia sí!, dictaduras no!» y «Abajo quien tú ya sabes».
Su proceso judicial se caracterizó por la ausencia de pruebas en su contra, incluso los testigos de la defensa terminaron detenidos horas antes de la vista oral del juicio, sin cargo alguno. En 2019, cuando iba terminar liberado, se le alargó la condena a cinco años por la supuesta comisión de un atentado en prisión.
Mendoza Reyes, activista de la Unión Patriótica de Cuba, está en la cárcel desde el 18 de diciembre de 2017 por participar en actividades pacíficas para pedir democracia en Cuba.
La acusan del supuesto delito de peligrosidad social pre-delictiva, que permite condenas sin delito o grado de tentativa. Mientras cumple una condena de dos años y medio, su hijo ha sido víctimas de represalias al ser apartado de sus estudios de música.