Las fuerzas iraquíes anunciaron este sábado que últimaron a tres miembros del grupo terrorista Estado Islámico, EI, además de destruir tres vehículos desde los que habían lanzado misiles Katiusha contra la base militar de Al Qayara, al sur de la ciudad de Mosul, antiguo bastión yihadista en el norte de Irak.
El comandante de las operaciones de la provincia de Nínive, de la que Mosul es capital, Noaman al Zaubai, suministró la información.
El centro de información de estas fuerzas aseguró que 17 proyectiles fueron lanzados contra la base militar de Al Qayara, lugar donde hay fuerzas estadounidenses que colaboran con las iraquíes en la lucha contra los extremistas. Pero no ofreció detalles sobre si se produjeron daños en las instalaciones.
El alcalde de la comarca de Al Qayara, Saleh al Yaburi, dijo que más de diez Katiusha fueron lanzados desde una camioneta que portaba una lanzadera de cohetes. Sin causar víctimas.
El lanzamiento, según Al Zaubai, de esos proyectiles “no representa una amenaza para la situación de seguridad actualmente estable en la provincia de Nínive”.
Agregó que están buscando otra célula terrorista como parte de sus operaciones para acabar con la presencia del EI en la región.
Señaló que el grupo radical intenta “subir el ánimo de sus combatientes, pero estos ya no representan ningún peligro para Nínive”.
Irak está en alerta, después del fin territorial del califato en Siria, ante posibles infiltraciones de radicales a través de las fronteras entre los dos países, donde el EI estableció sus dominios durante años.