Los habitantes de Kiribati y Samoa, naciones insulares situadas en el Pacífico sur, fueron los primeros en recibir el Año Nuevo 2020. Luego vino Nueva Zelanda.

Australia canceló los espectáculos pirotécnicos en la capital y otras ciudades debido a los incendios forestales que arden principalmente en el sureste.

Al menos 12 personas han muerto y más de 3 millones de hectáreas se han quemado en los fuegos, que comenzaron el pasado julio.

Sydney, la mayor ciudad del país, sí recibe el año con fuegos artificiales, a pesar de más de 280.000 personas han pedido su cancelación en todo el país debido a los incendios.

Fuegos artificiales cubrieron el cielo de Sydney

Nueva Zelanda no se quedó atrás y abrió el año con fuegos artificiales, espectáculos de láser y música en la capital y en Auckland, la ciudad más poblada del país, donde el Año Nuevo congrega a miles de personas en la emblemática Sky Tower, un edificio de 328 metros de altura.

En los países del sureste asiático comenzó también la celebración del Año Nuevo.


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