Foto EFE

Un ciudadano estadounidense se coló en 2015 desde China hasta Corea del Norte, donde permaneció retenido nueve semanas. Durante ese lapso fue interrogado, antes de ser devuelto al país vecino, reveló la web especializada NK News.

«Esta persona nos contactó hace dos meses para relatar su historia, que hasta ahora no había aparecido en ningún medio», explicó este jueves a EFE en Seúl Chad O’Carrol, director de la web y coautor del reportaje.

El estadounidense, del que solamente se sabe que se llama Miles, pues su apellido no se ha revelado, decidió entrar ilegalmente en Corea del Norte. Miles había residido ahí «cinco o seis meses» en 2014. Trabajaba como cooperante en una granja en Rajin (noreste), después de que las autoridades norcoreanas le denegaron un visado para un viaje organizado.

El 12 de agosto de 2015 en la madrugada, Miles atravesó el río Yalu (Amnok en Corea del Norte), que divide ambos países. El viaje lo hizo a bordo de una barca inflable. Luego realizó una fotografía que colgó en su perfil de Twitter, en la que se ve que efectivamente alcanzó la orilla norcoreana.

Entrega

Después se «entregó» en un acuartelamiento cercano y pasó tres semanas en Sinuiju sometido a interrogatorios, a veces de hasta 18 horas al día. Así fue hasta que el régimen corroboró que no era un espía. Detallaron que su motivo para entrar en el país era «expresar su amor» por Corea del Norte, según el reportaje.

Miles, que mostró correos electrónicos entre el Departamento de Estado y su familia para certificar que estuvo retenido, pasó otras seis semanas retenido en un hotel de Sinuiju hasta que las autoridades chinas aceptaron su retorno.

No es el primer estadounidense que se cuela ilegalmente en Corea del Norte desde China.

O’Carroll explicó que tiene constancia de que en los últimos años se han originado otros casos de estadounidenses e incluso de un europeo. La mayoría turistas, que fueron detenidos en Corea del Norte sin que se informara de ello.


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