La recién instituida Comisión Nuevos Mártires – Testigos de la Fe se reunió el 9 de noviembre de 2023, en el Dicasterio para las Causas de los Santos, bajo cuya égida opera a instancias del Papa Francisco, para hacer operativo su mandato con vistas al Jubileo de 2025.
El servicio conmemorativo que se prestará en esta primera fase se referirá a los cristianos cuyas vidas fueron truncadas o donadas de diversas maneras en obediencia al Evangelio, en el lapso de tiempo comprendido entre el año 2000 hasta el presente. Actualmente hay más de 550 testigos de los que se conocen las circunstancias de fallecimiento y su servicio a la Iglesia y al pueblo de Dios. Se ha creado un sitio web para acompañar los trabajos de la Comisión y proporcionar información esencial.
Según informa una nota difundida por la Oficina de Prensa vaticana, la encuesta sobre las víctimas cristianas y el ofrecimiento de la vida por parte de laicos, pastores, consagrados y consagradas se servirá de los esfuerzos ya realizados por Fides y otras agencias, pero también de nuevas investigaciones, con la ayuda de los obispos, las congregaciones religiosas y quienes custodian la memoria de estos cristianos.
Compromiso y metodología
Se esbozaron las líneas de compromiso y la metodología. También se previeron sinergias externas a los miembros de la Comisión, en particular por lo que respecta a la reconstrucción de los contextos continentales, regionales y nacionales en los que tuvo lugar la efusión de sangre y el don de la vida. Se recordó la contribución de muchos fieles de las Iglesias católicas orientales, con especial atención a Oriente Medio y Asia. También se recordó el valor ecuménico del martirio en sentido amplio y la necesidad de tener en cuenta la riqueza del testimonio ofrecido por cristianos de otras confesiones. El Dicasterio para las Causas de los Santos, en la persona del Presidente de la Comisión, monseñor Fabio Fabene, puso a disposición de la Comisión los instrumentos necesarios para llevar a cabo la tarea que se le asignó (recursos humanos y técnicas).
Luz de esperanza
Junto con el vicepresidente, el profesor Andrea Riccardi, se han revisado las investigaciones anteriores, extrayendo sugerencias para investigaciones futuras. En un espíritu de feliz cooperación, se disponen, pues, a entrar en el corazón del reconocimiento y del encuentro con estos testigos, cuya vida y muerte están marcadas por el Evangelio, el amor a los más débiles, la búsqueda de la paz y el doloroso enfrentamiento con múltiples designios del mal, sin abandonar nunca, sin embargo, la fe en el bien. Constituyen una luz de esperanza y una voz humilde pero elocuente que llama al bien supremo de la vida, a la unidad de la familia humana, a la fuerza desarmada de los cristianos.