Medio Oriente ha estado alejado de los focos durante mucho tiempo. La guerra de Ucrania ha copado el interés y el esfuerzo internacional. Pero la tensión ha vuelto a desbordar la región y Hamás -el gobierno de facto de la Franja de Gaza- e Israel han entrado nuevamente en guerra. El grupo radical lanzó un ataque sorpresa contra el país hebreo el 7 de octubre. Una brecha en la Inteligencia israelí -una de las mejores del mundo- permitió que milicianos de Hamás entraran por tierra, mar y aire a Israel, causando el terror en los pueblos colindantes con la Franja.

Una incursión que ha dejado en evidencia a uno de los ejércitos más poderosos del mundo. Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han respondido con una fuerza sin precedentes, a la cabeza de la contraofensiva el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant. El ministro se ha mostrado firme y ha amenazado con una respuesta israelí que «se recordará los próximos 50 años». Vestido de riguroso negro y con rictus serio, Gallant se mostró tajante, ante los israelíes que se quejaban de la falta de respuesta del Ejército hebreo: «El precio que pagará la Franja de Gaza será muy alto, cambiará la realidad para las próximas generaciones».

Pero ahora que ha explotado de nuevo el conflicto entre Palestina e Israel, la pregunta es quién es Yoav Gallant, la cabeza detrás de la ofensiva israelí bautizada como Espadas de Hierro. El ministro de Defensa inició su carrera militar en 1977 como comando naval en 13ª Flotilla. En 1992, Gallant fue designado por el entonces comandante de la marina, Ami Ayalon, para el mando de la 13ª Flotilla, cargo que debía asumir en 1994. Gallant prefirió no estudiar durante los dos años restantes, y en su lugar pasó a las fuerzas terrestres, y en 1993 asumió el mando de la Brigada Menashe (Jenin) de la División de Cisjordania.

La carrera militar de Gallant se extiende hasta 2005, cuando fue nombrado general y comandante del Mando Sur de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF). Durante su mandato, las IDF se embarcaron en la Operación Plomo Fundido contra Hamás en la Franja de Gaza. Gallant dirigió la operación, y su papel sobre el terreno así como el éxito de la operación le valieron elogios que le sirvieron para ser uno de los candidatos a jefe del Estado Mayor.

Pero en 2011 sus aspiraciones al cargo se vieron truncadas por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el entonces ministro de Defensa, Ehud Barak. Ambos líderes decidieron anular el nombramiento de Gallant tras meses de escándalo en torno debido a las acusaciones de que se había apoderado de tierras públicas cerca de su casa en Moshav Amikam. Tras una profunda investigación sobre las acusaciones, el fiscal general Yehuda Weinstein declaró que sus conclusiones «plantean importantes dificultades jurídicas para la decisión de nombrarlo».

Weinstein alegó que correspondía al primer ministro y al ministro de Defensa decidir si Gallant podía asumir el cargo como nuevo jefe del Estado Mayor de las FDI. Ese mismo día Weinstein notificó al primer ministro Netanyahu que no podía defender el nombramiento de Gallant como jefe de Estado Mayor debido a impedimentos legales.

Tras retirarse del servicio militar, el ministro de Defensa se afilió al partido Kulanu, en enero de 2015. Ocupó el segundo lugar en la lista del partido para las elecciones de ese año y fue elegido miembro de la Knéset, el  Parlamento israelí, al obtener el partido 10 escaños. Posteriormente fue nombrado ministro de Construcción en el nuevo gobierno.

En las elecciones de 2022, Gallant se presentó en la lista del Likud -formación del primer ministro israelí- y fue nombrado ministro de Defensa tras la victoria de Netanyahu. Doce años después de que el propio primer ministro denegará a Gallant el puesto de jefe del Estado Mayor, ahora se ha convertido en la cara visible de una nueva fase de la guerra entre Israel y Palestina.

 


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