El diputado Carlos Valero denunció este sábado que a un grupo de venezolanas detenidas en Trinidad y Tobago les han irrespetado sus derechos humanos.
Las ciudadanas, recluidas en el Centro de Detención de Inmigrantes, IDC, por presuntamente haber cometido delitos migratorios, están aisladas, no les permiten comunicarse con sus familiares y no pueden salir de las celdas, ni siquiera al comedor, dijo el parlamentario.
“Venezolanas detenidas en Trinidad y Tobago que se encuentran en la cárcel de IDC denuncian retardo procesal y supuesta extorsión. Hay quienes ya han cumplido la pena por entrar ilegalmente al país y las mantienen presas en condiciones inhóspitas”, agregó.
Indicó que las venezolanas advierten que iniciarán una huelga de hambre si las mantienen en esas condiciones.
“Exhortamos a las autoridades a ejecutar los mecanismos necesarios para que cese esta situación”, expresó.
Valero difundió un audio en el que una de las víctimas ofreció detalles: “Nos maltratan verbal y psicológicamente. Solo los viernes podemos llamar a nuestra familia, y por solo 15 minutos; a veces pasamos un mes sin llamar. No fuimos tomadas en cuenta en el supuesto registro que se hizo. Ha venido la gente de la ONU, de la Embajada de Venezuela y no los dejan pasar”.
#5Oct #ATENCIÓN Audio de una de las venezolanas procesada por delito migratorio en Trinidad y Tobago, que denuncia que en la cárcel de IDC son víctimas de maltratos físicos y verbales, aislamiento, no les permiten la visita de la ONU ni las incluyeron en el proceso de registro pic.twitter.com/pkUtkrJvJb
— Carlos Valero (@CarlosValero08) October 5, 2019
Ingreso irregular
A mediados de año, el legislador denunció que 103 venezolanos seguían detenidos en la IDC, a pesar de que tenían los papeles en regla y habían pagado multas por supuesto ingreso irregular a la isla.
En ese momento iniciaron una huelga de hambre en protesta por la desatención de las autoridades.
El 26 de octubre, David Smolansky, coordinador de la OEA para atender la crisis de migrantes venezolanos, solicitó la liberación de sus connacionales retenidos desde hace meses.
También pidió la cooperación del Reino de los Países Bajos para empezar el registro de 40.000 venezolanos en Curazao y Aruba.