El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se reunió con miembros del exilio venezolano en Miami, donde anunció que el gobierno del presidente Donald Trump continuará haciendo los esfuerzos necesarios para restablecer la democracia en Venezuela.
En la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, en Doral, reiteró el compromiso por la libertad: “Nosotros estamos con ustedes y estaremos de su lado. Creo con todo mi corazón que Venezuela será de nuevo libre”.
Dijo que la visita a Colombia, Argentina, Chile y Panamá le permitió comprobar que había muchos aliados de la libertad. “Estados Unidos está del lado del pueblo que quiere ser libre. Nuestra seguridad y prosperidad están vinculados a una América Latina próspera. La democracia en el continente beneficia a todo el mundo”.
Alertó que el gobierno de Trump está muy preocupado por los crímenes transnacionales y el narcotráfico. “Son una gran amenaza para la seguridad del continente. Esta es una nueva era y Estados Unidos está comprometido con ello”.
El vicepresidente reiteró que en la lucha el objetivo era lograr elecciones libres, la liberación de todos los presos políticos y que termine la represión.
“Una Venezuela estable y pacífica está en los mejores intereses del hemisferio. El colapso del país nos afectaría a todos, pondría en peligro el bienestar del hemisferio y no podemos permitir que eso suceda”, recalcó.
Añadió que el gobierno de Maduro ha equivocado el camino. Relató que las historias de venezolanos en el exilio lo conmovieron.
Pence tuvo palabras de elogio para los caídos en las recientes protestas: “Lamentamos la muerte de más de 130 venezolanos. Ellos son héroes, son mártires de la lucha por la democracia y nunca los olvidaremos”.
Pidió confianza a los venezolanos y dejó entrever que vendrían más sanciones en contra del gobierno. “Ustedes pueden tener la certeza de que Estados Unidos tomará las medidas económicas y diplomáticas que sean necesarias hasta que la democracia sea restaurada en Venezuela. Tenemos el apoyo real de los países, pero pedimos que hagan más”, indicó.
Y añadió: “Como dijo el presidente Trump no permitiremos que Venezuela se desmorone. El pueblo de Venezuela tiene un futuro de libertad”.
Otras intervenciones. El senador Marco Rubio y el gobernador de Florida, Rick Scott, también expresaron palabras de aliento para los venezolanos.
“Libertad, eso es lo que exigimos. Estamos aquí para ayudarlos. Nunca los vamos a abandonar”, afirmó Rubio en castellano.
Hizo un llamado para que el pueblo venezolano no se rinda: “Hay que resistir. Yo sé que a veces es difícil, pero no están solos. Hay una administración que está con ustedes”.
Scott advirtió que trabajaba en sanciones adicionales. Nombró a Leopoldo López: “Su hijo merece nacer en una Venezuela libre”.
Los congresistas Mario Diaz Balart e Ileana Ros Lehtinen estuvieron en las reuniones. Más temprano la Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio de Miami pidió con urgencia un alivio migratorio para los venezolanos que huyen de su país por motivos políticos.
“Lo peor es que Maduro se perpetúe” En la reunión con el vicepresidente Mike Pence participaron el alcalde de Chacao, Ramón Muchacho; el dirigente de Voluntad Popular Carlos Vecchio; los magistrados Alejandro Rebolledo y Antonio José Marval Jiménez; la hija de Antonio Ledezma, Daniela Schadendorf; y la mamá de Génesis Carona, asesinada en febrero de 2014, María Eugenia Tovar.. Muchacho indicó a Diario Las Américas que conversaron por más de dos horas. “Hubo tiempo para escuchar nuestras propuestas”, señaló. Dijo que anhelaba que el cambio fuera pacífico: “Somos optimistas sobre la presión internacional que se va a ejercer sobre la dictadura”. “El efecto más contraproducente para los venezolanos es que Maduro se perpetúe en el poder. El objetivo de las sanciones es liberar de sufrimiento. Los venezolanos estamos muriendo de hambre. Todas las demás opciones son mejores que esa”, aseveró. |