En la reunión del Grupo de Lima del próximo 23 de julio en Buenos Aires, Colombia planteará que recuerde la imposición de más sanciones focalizadas a las personas afectas al régimen de Nicolás Maduro, anunció en Washington el canciller de ese país, Carlos Holmes Trujillo.
Al término de un encuentro este martes con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, el jefe de la diplomacia colombiana anticipó la propuesta que hará en ese encuentro en Argentina, en el que se buscará intensificar la presión internacional contra Maduro.
«Se trata de imponerle sanciones a las personas afectas al régimen, no al pueblo venezolano. Y naturalmente somos amigos de esas sanciones que, en efecto, han originado un resultado muy positivo en la creación de condiciones que conduzcan a que haya otra vez democracia y libertad en Venezuela», declaró Trujillo a los periodistas.
El ministro indicó que se buscarán medidas económicas y diplomáticas, que no detalló, y consideró que son absolutamente indispensables en este momento en el cual crece el respaldo internacional al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó.
Estados Unidos y Colombia fueron los primeros países en reconocer a Guaidó como presidente interino de la República de Venezuela, declaración a la que se han sumado alrededor de 50 países.
Sobre la posibilidad de un respaldo de la región a los acercamientos entre representantes de Maduro y la delegación de Guaidó en encuentros celebrados en Barbados, Trujillo aclaró que la política de Colombia está definida en el Grupo de Lima.
«El Grupo de Lima apoya el itinerario definido por el presidente Juan Guaidó: fin de la usurpación, gobierno de transición y convocatoria de elecciones, y naturalmente este es un asunto de naturaleza regional, por eso actuamos en el marco de la Organización de Estados Americanos y también en el marco del Grupo de Lima», expresó.
Consultado acerca de su encuentro con Pompeo, el ministro dijo que tuvieron una reunión muy productiva con el secretario de Estado, quien estuvo acompañado por el representante especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, y otros funcionarios.
«Tratamos temas relacionados con la lucha de Colombia frente al problema mundial de la droga y los grandes avances que se han hecho durante la administración del presidente Duque», detalló el funcionario, que reconoció que también estuvo en la agenda la reunión del Grupo de Lima en Buenos Aires y la cita que se celebrará el 6 de agosto, en Lima, para abordar la crisis venezolana.
En palabras del canciller, se trató de una reunión productiva que da cuenta de la magnífica relación bilateral que existe entre Estados Unidos y Colombia.
Trujillo, que en su primera jornada se reunió con funcionarios de los Departamentos de Estado y del Tesoro, comenzó el día con su participación en un diálogo sobre la asociación Estados Unidos-Colombia: de la crisis venezolana a los esfuerzos antinarcóticos, organizado por el centro de estudios Atlantic Council.
En su intervención, Trujillo expresó la preocupación de Colombia por los nexos entre el régimen de Maduro y grupos como la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, que catalogó de terrorista.
«El régimen de Maduro siempre ha estado abierto a la acción de actividades de organizaciones terroristas colombianas desde ese territorio contra los intereses de Colombia», afirmó el canciller, al advertir que «hay jefes del ELN y miembros del ELN que actúan desde Venezuela contra Colombia».
«Los vínculos que existen entre el régimen y esa organización terrorista colombiana, además de su vínculo con otras organizaciones terroristas del mundo, son evidentes y eso lo denuncia Colombia permanentemente como una fuente de peligro real», afirmó. Pero, además, exteriorizó su preocupación por que en las elecciones regionales de octubre próximo en Colombia se politice la migración venezolana.
«Aprovechamos para hacer un llamado a los candidatos a que eviten politizar el asunto de la migración. Los colombianos saben que el presidente Duque ha tomado la decisión de hacerle frente a la migración con sentido humanitario, con sentido de solidaridad», defendió posteriormente ante la prensa.