El gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) cerraron este martes en La Habana el sexto ciclo de negociaciones con una prórroga semestral del cese el fuego, la suspensión «temporal» de los secuestros de la guerrilla y la creación de un fondo internacional para financiar el proceso de paz.
Las negociaciones, que comenzaron el 22 de enero, fueron intensas y complicadas, según han reconocido ambas partes. «¿Quién dijo que la paz era fácil?», preguntó en la clausura del diálogo la negociadora jefe del gobierno colombiano, Vera Grabe.
La mejor prueba de ello fue haber extendido por un día más el cierre oficial del ciclo, previsto inicialmente para el lunes, con el fin de conseguir atar los últimos cabos de los acuerdos en los asuntos que se habían propuesto abordar las partes en Cuba.
Esa decisión de último momento ya venía con un precedente de horas antes. El cese el fuego bilateral, nacional y temporal fue prorrogado por otros seis meses cerca de la medianoche del lunes, a minutos de que expirase la tregua que entró en vigor el 3 de agosto y fue extendida por siete días el lunes para dar más tiempo a la negociación.
Más allá de ese pacto trascendental para el avance del proceso de paz, la principal novedad de este martes fue -de entre los cinco acuerdos suscritos- que ambas delegaciones acordaron crear un «fondo multidonante para el proceso de paz».
Para Grabe, este mecanismo pretende «fortalecer y hacer sostenible este proceso» siguiendo los estándares de transparencia de Naciones Unidas.
«Hecho histórico»
El negociador jefe del ELN, Pablo Beltrán, indicó que el fondo servirá para «soportar el conjunto de la implementación de los acuerdos» y que estará abierto a todos los Estados y organismos multilaterales que quieran contribuir, siempre con criterios de «transparencia» sobre el manejo del mecanismo.
Aseguró asimismo que se han puesto en «compás de espera» las «operaciones de finanzas que implican retención de personas» mientras «que avance el cese y otros acuerdos que permitan al ELN comprometerse aún más en nuevas esferas del cese el fuego».
Beltrán, quien reconoció que con esta decisión la guerrilla no tiene «en este momento» fuente de financiación, resaltó que este fondo «no es solamente» para suplir la financiación que la guerrilla ha obtenido históricamente a través de las retenciones con fines económicos (secuestros), «sino que es un fondo que va a atender la implementación de todos los acuerdos».
A este respecto, Grabe destacó que la suspensión de las retenciones es un «paso fundamental que tenemos que valorar» y un «hecho histórico». «Finalmente, gana la voluntad de seguir adelante en este proceso. El proceso está vivo», agregó.
En el mismo tono, el negociador jefe del ELN, Pablo Beltrán, afirmó que los integrantes de la mesa quieren «sacar a Colombia de la órbita de la guerra perpetua».
«Factores problemáticos»
Sobre las dificultades que se presentaron en estas dos semanas de negociación, Grabe señaló que destacaron las «diferentes situaciones que se han presentado en temas como el cese el fuego», además de las «interpretaciones diferentes» sobre este punto.
Aunque sin referirse directamente al respecto, Beltrán aseguró que la guerrilla espera que el gobierno afronte «los factores» que ellos consideran que «han sido problemáticos» para el cese.
Entre ellos, según Beltrán, está el aumento de la actividad de «múltiples bandas, carteles y grupos paramilitares», «aprovechando» el cese entre el gobierno colombiano y el ELN; los «ataques a miembros de la dirección nacional» de la guerrilla, y «despliegues y acantonamientos» nuevos del Ejército colombiano en zonas «tradicionales» del ELN.
Otro de los puntos claves fue la presencia en Cuba del ministro de Defensa colombiano, Iván Velásquez Gómez, a finales de enero, a quien la guerrilla le transmitió sus inquietudes sobre el nuevo cese, de acuerdo con el jefe negociador del ELN.
«Más que tomar nota, pensamos que (Velásquez) va a verificar todas estas informaciones y va a plantear desde el ministerio salidas. Nosotros vamos a esperar las respuestas y eso va a significar un fortalecimiento del proceso», argumentó Beltrán.
Esta debe ser la dinámica de las negociaciones de paz, prosiguió: «Aquí cada uno hace un esfuerzo. Ese (la suspensión de las retenciones con fines económicos) es el que nosotros colocamos. Y esperamos que otros refuerzos que necesita el cese se den».
El negociador jefe del ELN añadió que su intención es «revisar» y «evaluar» en el séptimo ciclo, que tendrá lugar en Caracas en abril, «todos los compromisos», en referencia a los pasos que la guerrilla espera que el gobierno colombiano adopte como respuesta a su decisión de suspender los secuestros.