El gobierno de Brasil decidió este jueves el cierre temporal de sus fronteras terrestres para contener la expansión del coronavirus covid-19. Sin embargo, permitirá el tránsito de mercancías y el regreso de los brasileños, entre otras excepciones.
La medida, publicada en el Diario Oficial, tendrá una validez de 15 días prorrogables a partir de este jueves y prohíbe de manera temporal y con carácter «excepcional» el ingreso de «extranjeros oriundos» de Argentina, Bolivia, Colombia, Guayana Francesa, Guyana, Paraguay, Perú y Surinam.
«Queda restringida, por un plazo de quince días, contando a partir de la publicación de esta resolución, la entrada al país, por carreteras o medios de transporte terrestre, de extranjeros oriundos de los países mencionados», señala el texto.
El gobierno de Jair Bolsonaro afirmó que publicará otra resolución en relación con la frontera terrestre con Uruguay.
Cierre de frontera con Venezuela
En el caso de Venezuela, el mandatario anunció el martes pasado el cierre parcial de la frontera con la nación caribeña ante, según dijo, la «incapacidad» de su homólogo Nicolás Maduro de contener el coronavirus.
El cierre de las fronteras terrestres por parte de Brasil se da después de que algunos países de la región habían adoptado medidas similares, incluso más restrictivas, como en el caso de Colombia, para contener la pandemia.
El Ejecutivo justificó su decisión en virtud de las recomendaciones de los funcionarios sanitarios ante «los riesgos de contaminación y diseminación del coronavirus».
No obstante, la medida no se aplicará a los brasileños o naturalizados en Brasil, los migrantes con permiso de residencia, los trabajadores de organismos internacionales ni tampoco a los funcionarios extranjeros acreditados oficialmente.
La restricción tampoco impedirá el libre tránsito de mercancías entre los países vecinos, la ejecución de medidas humanitarias previamente autorizadas por las autoridades sanitarias locales ni la circulación de residentes en ciudades que comparten frontera.
450 casos
Brasil es el país de Latinoamérica más afectado por el coronavirus con cerca 450 casos confirmados, y 6 muertes, 4 de ellas en Sao Paulo y 2 en Río de Janeiro, los dos estados más perjudicados del país.
También investiga alrededor de 11.000 casos considerados sospechosos.