El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, pidió este jueves en Jerusalén al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que lleve ante la justicia a los colonos israelíes en Cisjordania ocupada que atacan, muchas veces de forma letal, a los palestinos.
Blinken, quien ha visitado Israel en diversas ocasiones desde que estalló la guerra entre el Estado judío y el grupo islamista Hamás, el 7 de octubre, «instó a tomar medidas inmediatas para responsabilizar a los colonos extremistas por la violencia contra los palestinos en Cisjordania», indicó un comunicado del Departamento de Estado.
«Estados Unidos sigue comprometido con medidas tangibles para promover un Estado palestino que viva en paz, libertad y seguridad junto a Israel», añadió el funcionario estadounidense, durante su reunión con Netanyahu.
Cisjordania ocupada e Israel viven su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05), un fenómeno que se agudizó desde que estalló la guerra entre Israel y Hamás, el 7 de octubre.
Desde entonces, 248 palestinos de Cisjordania (incluidos más de 60 menores de edad) han muerto en eventos violentos, la mayoría por fuego de tropas israelíes pero 9 por ataques de colonos, incluido un niño. Además, se han registrado cerca de 3.000 heridos.
El encuentro entre Blinken y Netanyahu se produce después de que se registraron dos incidentes de seguridad: uno en Jerusalén, en el que un palestino mató a tiros a tres israelíes, y otro en Cisjordania, donde un presunto atropellamiento intencional dejó dos soldados israelíes levemente heridos.
También ocurre en el séptimo día de tregua entre Israel y Hamás, tras un acuerdo mediado por Estados Unidos, Qatar y Egipto que incluye el intercambio de rehenes a manos del grupo islámico por presos palestinos en cárceles israelíes, así como la entrada de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza.
Blinken reafirmó el apoyo de Estados Unidos al derecho de Israel a protegerse de la violencia terrorista de conformidad con el derecho internacional humanitario e instó a Israel a tomar todas las medidas posibles para evitar daños a los civiles, indicó el Departamento de Estado.
La guerra ha dejado más de 15.000 palestinos muertos, la mayoría mujeres y niños, en la Franja de Gaza, que quedó sumida en una grave crisis humanitaria. Del lado israelí, se registran más de 1.200 muertos.
El secretario de Estado busca ampliar el cese el fuego, pero Netanyahu le dejó claro que reanudará los ataques sobre la Franja en cuanto termine de recuperar a los rehenes.
«Hemos jurado, he jurado, eliminar a Hamás. Nada nos detendrá», dijo el primer ministro israelí, según comunicado difundido por su gobierno.
«Continuaremos esta guerra hasta que logremos los tres objetivos: liberar a todos nuestros rehenes, eliminar completamente a Hamás y garantizar que ninguna amenaza como esta vuelva a surgir de Gaza», subrayó.
En su visita, Blinken ya se reunió previamente con el presidente israelí, Isaac Herzog, así como con los miembros del Gabinete de Guerra israelí, y contempla una cita con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, en Ramala, Cisjordania.