Tras la desfavorable experiencia que vivió, Jessica obtuvo un gran alcance y apoyo en las redes sociales. Gracias a esto, continúa con su rutina laboral en el restaurante y también se transformó en una reconocida creadora de contenidos. Si bien dejó de lado esta experiencia negativa, ahora espera que no vuelva a suceder y recibir un buen trato por parte de los clientes.

La moza de un restaurante tomó una drástica decisión después de que un grupo de comensales se retirara del lugar sin pagar. En las redes sociales, relató lo sucedido y dejó una dura advertencia contra personas que se fueron. Su gesto radical se hizo viral en cuestión de horas.

Jessica Guevara, una camarera de California, Estados Unidos, le dio una lección de vida a una de las clientes que realizó dicha acción y mostró la contundente venganza que llevó a cabo.

«A las chicas que se fueron corriendo y no pagaron su cuenta, dejaste tus anteojos, tonta», comenzó a narrar en un video que compartió en su cuenta de Tik Tok. Acto seguido, procedió a destrozar este elemento que se utiliza para mejorar la visión.

«Espero que estos sean tus 125 dólares», escribió en la descripción del clip y de esta manera hizo referencia al importe que no fue abonado. Inmediatamente, el posteo recibió cientos de mensajes de indignación por parte de sus seguidores, que hicieron foco en la actitud de las jóvenes y le aconsejaron que les realice una denuncia por el mal momento que pasó.

«No había necesidad de irse sin pagar, qué triste que tengan que pasar por situaciones así», escribió una usuaria. «Creo que las mujeres se tomaron todo como una broma, pero no midieron las consecuencias de lo que podría llegar a pasar», agregó otra. «Supongo que ella nunca lo vio venir. Como persona que trabajó en la industria, te apoyo», sostuvo un tercero. «¡Qué pena que ella nunca pueda ver esto!», resaltó uno más.

Sin embargo, otros hicieron hincapié en la acción de Guevara, que pisó a los anteojos y los dejó sin posibilidad de arreglarlos. «Los podrías haber vendido»; «¿se te ocurrió que antes de destruirlos para TikTok, podrías haberlos donado?»; te apuesto que eso fue muy satisfactorio, pero es muy caro», fueron algunos de los mensajes que le dejaron.

En una segunda filmación, la protagonista de la historia aclaró con detalles los motivos principales de su enojo. Allí, afirmó que los dueños del restaurante le hicieron pagar de su propio bolsillo los 125 dólares de la cuenta: «Me convertí en la principal víctima de lo sucedido».

Con la aclaración incluida por parte de la moza, el video en cuestión de días superó seis millones de visualizaciones y obtuvo 1.000.000 de «Me gusta». Aún acumula anécdotas, críticas, reacciones positivas y comentarios de todo tipo.

De esta manera, la mujer dejó en claro que una simple broma o un juego entre amigas puede generar consecuencias para los trabajadores del rubro. Asimismo, aseguró que nunca va a pasar por inadvertidas este tipo de situaciones.

Tras la desfavorable experiencia que vivió, Jessica obtuvo un gran alcance y apoyo en las redes sociales. Gracias a esto, continúa con su rutina laboral en el restaurante y también se transformó en una reconocida creadora de contenidos. Si bien dejó de lado esta experiencia negativa, ahora espera que no vuelva a suceder y recibir un buen trato por parte de los clientes.

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