Una mujer australiana protagonizó un estremecedor momento: mientras preparaba su desayuno en la cocina de su casa, tomó la tostadora y descubrió que detrás del electrodoméstico estaba escondida una serpiente venenosa.
La mujer, que vive en Queensland, salió a correr y, sin darse cuenta, dejó la puerta de su casa abierta. Aparentemente, a partir de ese descuido, la serpiente venenosa se habría deslizado dentro de la vivienda.
«Cuando la mujer regresó a su casa, encontró a la serpiente detrás de la tostadora«, dijo el titular del centro de Reubicación y cazadores de serpientes en el norte de Brisbane, Steven Brown.
A pesar del temeroso momento, Brown reconoció que la mujer pudo controlar la situación. «Estaba bastante tranquila cuando llegué. Sabía que debía mantenerse alejada y no tomar el asunto en sus propias manos», explicó Brown.
Esta serpiente era una especie negra de vientre rojo que son tímidas y, por lo general, solo muerden si están angustiadas. Además, Brown detalló que este tipo de serpientes se vuelven más activas cuando se encuentran en búsqueda de un lugar fresco.
«Las serpientes de vientre rojo se sienten bastante mal por el calor porque son negras y absorben la temperatura. Como todas las serpientes, quieren un lugar fresco y tienden a acercarse a las casas de la gente, especialmente si la puerta está abierta», dijo Brown.
Por último, detalló que si bien esta es considerada una de las serpientes más letales del mundo, no es agresiva a menos que sea acosada y no se conocen muertes causadas por la especie. Aunque, en caso de que muerda, Brown dijo que existe la posibilidad de muerte o de contraer síntomas como fiebre, escalofríos, dolores y deterioro muscular.