La diseñadora venezolana Fabiana Kubler siempre ha gravitado entre el color y a la responsabilidad social.
Desde niña ha sido parte de FundaProcura, participando en las actividades de recaudación de fondos y posteriormente en la creación del famoso Salón Vintage FundaProcura. Es conocida por su trayectoria exitosa en Venezuela donde se destacó por sus diseños de moda que buscaban integrar la moda con una causa social, bien fuese por la utilización de materiales sostenibles o el uso de fondos de las colecciones para promover causas sociales y educación infantil.
Sus diseños para la mujer venezolana junto con su visión social la llevaron a realizar varias colaboraciones con fundaciones como Amigos del Niño con Cáncer; Andrea, el brillo de un Angel y FundaProcura. Luego se dedicó al empoderamiento de mujeres de minorías rurales venezolanas asesorando en el diseño y mercadeo de chinchorros modernos y otras confecciones típicas venezolanas que fueron muy exitosos tanto en Venezuela como en el exterior, mejorando con ello la calidad de vida de muchas familias.
Después de migrar en 2017 y sensibilizada por la maternidad y los cambios en su vida, enfoca su creatividad expresándola en varias aristas, ya no sólo desde la confección de moda, si no desde las artes visuales, la joyería y hasta la literatura infantil.
En joyería su visión es crear piezas que transmitan su lenguaje artístico y que para el público tengan un valor más allá de lo estético, un valor espiritual, como talismanes personales. Al igual que con sus confecciones, en la joyería también se destaca por un compromiso con la sostenibilidad y el empoderamiento de mujeres en zonas rurales.
En literatura infantil, se inspira en los retos vividos en estos años. Escribe e ilustra en compañía de Rosana Faría un cuento infantil llamado El Regalo que está en impresión en España. El libro, además de catártico, comparte un mensaje universal sobre los regalos que nos da la vida y que solo entendemos al pasar del tiempo. Estas ilustraciones, profundamente personales la llevan a sumergirse de nuevo en el color y la forma abstracta, esta vez a través de la acuarela. Con este medio consigue una manera de expresar emociones y realiza una colaboración con la marca de papel tapiz Kirigamia.
Es tal su necesidad de expresarse que inicia una maestría en Artes Visuales, la cual le ha permitido incursionar en diferentes medios incluidos digitales y a entender su proceso creativo.Uno en el cual la palabra escrita precede la exploración de un lenguaje visual.
Su nuevo reto surge de la combinación de sus principales intereses. Es el desarrollo de un proyecto para propiciar y promover la empatía, la inclusión y el respeto hacia niños con distintas capacidades dentro del aula, incluyendo a los padres y docentes a través del arte. Este proyecto lo está realizando de la mano de Rosario Anzola, creadora del Programa Papagayo de la Fundación Provincial.
Fabiana Kubler es un ejemplo de emprendimiento. Su capacidad de adaptación y compromiso en que su arte lleve un mensaje de valores y agradecimiento enriquece al mundo artístico.