El hijo de la princesa Eugenia, nieta de la reina Isabel II, y su esposo, Jack Brooksbank, se llama August Philip Hawke, anunció este sábado el Palacio de Buckingham.
El niño, que nació el pasado día 9 en un hospital privado en el centro de Londres, es el noveno bisnieto de la soberana británica y ocupa el undécimo lugar en la línea de sucesión al trono británico.
La cuenta oficial en Twitter de la Familia Real divulgó hoy la primera fotografía en la que la princesa Eugenia y su marido aparecen junto con al bebé.
«La pareja se siente emocionada por los buenos deseos que han recibido con motivo del nacimiento de su primer hijo y están encantados de compartir su primera imagen como familia», señala el mensaje.
La hija del príncipe Andrés se casó en 2018 con Brooksbank en una ceremonia religiosa celebrada en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor, tras haber conocido al empresario durante unas vacaciones de esquí en Suiza en 2010.
Princess Eugenie and Mr Jack Brooksbank have announced that they have named their son August Philip Hawke Brooksbank.
The couple have been touched by the well wishes they have received on the birth of their first child, and are delighted to share this first photo as a family. pic.twitter.com/xmFZ7AD92F
— The Royal Family (@RoyalFamily) February 20, 2021
«Queríamos presentarles a August Philip Hawke Brooksbank. Gracias por tantos mensajes maravillosos. Nuestros corazones están llenos de amor por este pequeño de tal forma que no podemos expresarlo con palabras. Estamos emocionados de poder compartir estas fotos con ustedes. Foto realizada por nuestra maravillosa matrona. Gracias a los maravillosos trabajadores esenciales, incluida nuestra matrona, que vinieron a dar de alta a nuestro niño», escribió la princesa junto a tres fotografías en su cuenta de Instagram.
El anuncio se conoce mientras el duque de Edimburgo, esposo de la reina, continúa ingresado como medida de «precaución» en una clínica londinense por problemas de salud cuya naturaleza no ha trascendido.
El Palacio ha subrayado que su dolencia no guarda relación con el coronavirus y ha avanzado que el príncipe Felipe, de 99 años, previsiblemente se mantendrá «en observación» al menos hasta entrada la próxima semana.