Un estudio de la Universidad de Manchester en el Reino Unido reveló que las personas acostumbradas a dormir mal, más de 11 horas o menos de 4, tienen una mayor probabilidad de padecer problemas pulmonares, como la fibrosis pulmonar.
Los relojes internos del cuerpo, explicaron los científicos, regulan casi todas las células a través de ciclos de 24 horas en procesos como el sueño, la secreción de hormonas y el metabolismo.
En el caso de los pulmones, el reloj se encuentra en las vías respiratorias, pero en las personas con fibrosis pulmonar dichas oscilaciones del reloj se extienden a los alvéolos, comentaron mediante una publicación de la universidad.
El estudio
Un estudio que realizaron en ratones reveló que al alterar el mecanismo del reloj biológico era posible interrumpir el proceso fibrótico. Esto hacían que los animales fueran más propensos a desarrollar fibrosis pulmonar.
Luego, los investigadores demostraron que la fibrosis pulmonar está asociada con la duración del sueño a corto y largo plazo. Para ello utilizaron datos humanos del Biobanco del Reino Unido y descubrieron una proteína del reloj central que altera la producción de otra en dicho padecimiento.
«Las personas que informaron que duermen regularmente cuatro horas o menos en un día duplicaron su probabilidad de tener fibrosis pulmonar. Mientras tanto, las que duermen 11 horas o más en un día triplicaron sus posibilidades de tener la enfermedad, en comparación con las que duermen siete horas por día», apuntaron.
También indicaron que se observaron riesgos más pequeños, pero aún elevados, en las personas a las que les gusta quedarse despiertas hasta tarde en la noche o en aquellas que trabajan por turnos.
¿Qué es la fibrosis pulmonar?
Esta enfermedad se produce cuando el tejido del pulmón se daña y propicia la aparición de cicatrices.
Dicho tejido engrosado y rígido dificulta el correcto funcionamiento de los pulmones, lo que provoca dificultad para respirar, de acuerdo con Mayo Clinic.
Los síntomas que presenta este padecimiento son: dificultad para respirar, tos seca, fatiga, pérdida de peso sin causa aparente, dolor en los músculos y las articulaciones, además de un ensanchamiento y redondeo de las puntas de los dedos de los pies y manos.
Además de dormir mal, existen factores de riesgo que propician el desarrollo de la fibrosis pulmonar. Ellos son la edad, pues afecta principalmente a adultos de mediana edad y mayores; el sexo, a ser más común en hombres; el tabaquismo, y tener antecedentes familiares.