pérdida de peso
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Adelgazar es relativamente fácil, pero mantener una composición corporal saludable no. Desafortunadamente, se ha enseñado que los alimentos con pocas calorías son los mejores y que la salud se mide a través del peso. Estas creencias pueden causar errores que frenan la pérdida de peso.

Alimentos de alto prestigio dietético

Los alimentos dietéticos o «light» no son más saludables que los convencionales. Si bien tienen alguna reducción -ya sea en azúcares o grasas- aportan calorías y, a diferencia de lo que se cree, también pueden hacer engordar.

Este tipo de productos se perciben como «ligeros» y, por tanto, se llegan a consumir de más. Asimismo, suelen tener una gran cantidad de otros ingredientes poco saludables.

Beber jugos

El consumo de jugos es visto como un hábito saludable. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud los considera alimentos compuestos por azúcares libres.

La ingesta máxima sugerida (no necesaria) de azúcares libres en la dieta diaria no debe rebasar los 50 gramos: tan solo un vaso de jugo de fruta natural aporta 50% de esta sugerencia.

Uso desmedido de endulzantes sin calorías

Durante las últimas décadas, los endulzantes sin calorías han cobrado gran auge, tanto en productos industrializados como en sustitución del azúcar de mesa.

Si bien este tipo de endulzantes son declarados por las autoridades sanitarias como seguros, no son saludables. Se vinculan con desórdenes metabólicos y aumento de peso, pues conducen a un mayor apetito e ingesta de alimentos.

Meriendas no necesarias

Durante muchos años, los nutricionistas prescribían cinco comidas al día con la «errónea» idea de que comer constantemente acelera el metabolismo. Hoy se sabe que esto no es cierto. Por el contrario, se ha visto que las personas que hacen solo tres comidas por día tienen un mejor control sobre la glucosa, la ingesta calórica, la saciedad y el apetito que quienes hacen meriendas.

Sobreestimar el ejercicio

Pensar que aumentar la actividad física da derecho a comer «de todo» es un frecuente error. Muy a menudo se sobreestima el ejercicio y se subestima lo que se come.

En un estudio publicado en The Journal of Sports Medicine and Physical Fitness, las personas que gastaron entre 200 y 300 calorías durante el entrenamiento estimaron que habían gastado alrededor de 800.

Hacer ejercicio aumenta un poco la tasa metabólica, pero es menos de lo que se piensa.

Dice el dicho que «lo que rápido llega, rápido se va». Adelgazar de forma saludable toma tiempo. Mantener hábitos de vida saludables (no solo dieta) favorecen la salud y, por tanto, una óptima pérdida de peso.


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