resoluciones de fin de año 2021

Si bien los médicos coinciden en que los propósitos que la gente debe hacer para cuidar su salud este año deben girar en reforzar las medidas de bioseguridad para mantener a raya la pandemia mientras esta dure, un grupo de ellos decidieron facilitar las cosas y sugerir tareas sencillas que no requieren esfuerzos y tampoco inversión.

Todo, ante la premisa de que la mayoría de los compromisos que muchos se plantean por esta época para mejorar su bienestar no se cumplen. En ese sentido, a través de un grupo de chat, dieron a conocer lo que cada uno considera que es la mejor de sus recomendaciones, que, además de producir resultados tangibles, la gente puede realizar sin mayores esfuerzos para mantenerse saludable.

Por supuesto, hubo sugerencias como la inscripción a un gimnasio o a un curso de yoga y meditación, así como la toma de vacaciones para desconectarse. Y, asimismo, las tradicionales, como ponerse y mantenerse al día en controles médicos, exámenes preventivos como citologías, mamografías, colonoscopias, visitas al odontólogo y, por supuesto, revisar los esquemas de vacunación en todas las edades. Sin embargo, aquí se presentan 10 de ellas que, de acuerdo con los profesionales que las sugieren, son de tal simpleza que no realizarlas parece más difícil.

1. Dormir bien

El descanso es fundamental para un buen funcionamiento del organismo. Al menos, entre 7 y 8 horas al día, dice Luz Amparo Cortés, médico especialista en medicina holística. “Una siesta de 15 minutos a mitad de esa jornada resulta reparadora”.

2. Comer para nutrirse

Luis Alberto Parra, cirujano de la Universidad Nacional de Colombia y profesor, afirma que es importante tener clara la frase «somos lo que comemos» e insiste que la alimentación influye no solo en la salud física, también en el estado de ánimo. En ese sentido, recomienda evitar los excesos, el azúcar agregada, las bebidas azucaradas y la comida chatarra; además, comer a horas, no hacer dietas sin supervisión profesional e hidratarse al punto de consumir 2 litros de líquidos en todas las formas (sopas, agua, jugos, bebidas sin azúcar) al día.

3. Hacer ejercicio regularmente

Moverse es el mejor seguro, también el más económico, indica Fernando Ospina, médico de la Universidad Nacional de Colombia, que agrega que la fórmula es tan sencilla como acumular 150 minutos de actividad física a la semana realizando deportes que no sean de alto impacto como caminar, nadar o montar en bicicleta, repartidos en sesiones desde 20 hasta 40 minutos 4 o 7 días a la semana. “De esta forma la gente no se cansa y el ejercicio tiene gran efectividad”.

4. Intentar hacer ayuno

Germán Maldonado, experto en medicina preventiva, explica que el ayuno intermitente (dejar de comer mínimo 16 horas y máximo 24 algunos días) demostró que retrasa el envejecimiento, mejora el perfil de las grasas en la sangre y reduce la inflamación crónica. “No te faltará energía, pierdes grasa acumulada y ganas músculo si, además, realizas ejercicio mientras lo practicas”, insiste Maldonado al recomendar esta pausa como algo saludable que se puede incrustar de manera progresiva en la cotidianidad.

5. Bajar el estrés

El psiquiatra Rodrigo Córdoba, profesor de la Universidad del Rosario, indica que uno de los propósitos ineludibles para el año que viene es atenuar las tensiones emocionales, en razón a que su permanencia desencadena alteración en todo el organismo que puede llegar a ser irreparable.

“Es muy importante escuchar las señales de fatiga y angustia para ponerles remedio”, dice el especialista, para lo cual recomienda evitar las sobrecargas laborales, fijar horarios, descansar, dormir bien, divertirse y si se practica la meditación, hacer más ejercicio. Y si la situación parece salirse de las manos, hay que buscar ayuda profesional.

6. Sonreír más

“Está demostrado científicamente que sonreír libera endorfinas”, sostiene Jorge Vásquez, médico de la Universidad Nacional y especialista en medicinas alternativas, quien recomienda buscarle siempre el lado amable a las cosas. Rodearse de personas amables, tener conversaciones divertidas y procurar reír más atenúa el dolor, mejora el sueño, relaja los músculos y mejora las defensas. “Es una terapia al alcance de todos y muy económica”.

7. Usar preservativos siempre

Cecilia Mogollón, experta en servicios ambulatorios, insiste en el uso del preservativo como una medida salvadora en todas las edades. “Se recomienda su uso por su doble función de prevención de enfermedades venéreas y de protección de los embarazos no deseados”, dice dejando claro que en los últimos tiempos esta práctica se ha relajado al punto que se ha visto un aumento de estas patologías, sobre todo en adolescentes, además de un impacto negativo en las cifras de embarazos tempranos.

8. Leer más

Pedro Cifuentes, médico experto en salud pública, rescata el valor de la lectura en razón de que favorece el entrenamiento del cerebro. Según el especialista, leer aumenta la concentración, favorece la memoria y la imaginación, mejora el vocabulario y disminuye el riesgo de padecer alzhéimer, además de reducir el estrés. “Dedicar un rato a leer antes de dormir, de manera rutinaria, produce beneficios que se empiezan a notar en poco tiempo, empezando por tener un sueño más saludable y reparador. Un buen hábito para aplicar este año”, agrega.

9. Cultivar mejores relaciones

Este año la pandemia ratificó la condición gregaria de los humanos, al punto que el afianzamiento de los lazos entre familiares, amigos y conocidos se ha convertido en un factor ineludible de bienestar a todo nivel. “Tan importante es el tiempo que se dedica cada quien como el que se comparte con los cercanos”, dice la salubrista Elizabeth Beltrán, y añade que las relaciones genuinas contribuyen al mejor bienestar e incluso a percibir sensaciones que la gente relaciona con la felicidad. En tal sentido sugiere mejorar el tiempo de contacto con familiares, amigos y compañeros; procurar realizar más actividades concretas con ellos, como juegos, ejercicio, cursos, tareas y pasatiempos compartidos.

10. Prevenir

Ángel Alberto Castro, internista y gastroenterólogo de la Universidad Nacional, insiste que un propósito ineludible para este año es no dejar pasar ningún síntoma moderado o severo y consultar a tiempo, en razón a que en estos tiempos la gente deja de asistir a los hospitales o las consultas por temor a los contagios, lo que puede hacer que muchos cuadros se compliquen. “Es claro que estos temores son infundados porque los centros de asistencia son los sitios en los que se aplican con mayor rigor las medidas de bioseguridad y en todo caso los riesgos son menores que los daños causados por una enfermedad que no se trate a tiempo.


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