Por última vez en 2020 nos acompaña el temido Mercurio retrógrado, desde el 13 de octubre hasta el 3 de noviembre, manteniendo aún su postsombra nueve días después.
Que se malinterpretan las conversaciones, que las comunicaciones fallan, que no firmes papeles legales o importantes y hasta que no comiences nada nuevo, porque no será duradero; eso ya todos lo sabemos, pero esta vez trataremos de ir un paso adelante y evitar que de algún modo sus efectos no sean tan intensos en cada uno.
La estrella de mercurio o de doce puntas es un buen aliado para disminuir su influencia, pues ayuda a completar el círculo de traslación que se interrumpe durante este tiempo; la puedes dibujar y llevarla en el bolsillo, cartera o usar un dije (apenas entra en la presombra yo no me la quito hasta que por fin se ha ido). Además de que atrae la abundancia, el amor, intensifica la buena salud, facilita la comunicación y te abre a ese bienestar espiritual. También puedes colocar esta estrella en tu hogar, ubicándola en la parte de atrás de la puerta de entrada, en tu carro o lugar de trabajo; no dejes ningún hilo suelto cuando Mercurio está retrógrado.
También representa la potencia opuesta de la divinidad, y por eso antes de pensar en lo complicadas que se pueden poner las situaciones debemos ver hacia adentro; la introspección nos ayudará a ver nuestra sombra y conectarnos con esa intuición que se mantiene latente en cada uno.
Toma en cuenta que todo puede salir mal, así que mantente alerta y con especial cuidado. No te confíes, realiza copias extras de cosas importantes para prever cualquier inconveniente. Habla con detenimiento y escucha de igual manera, recuerda que Mercurio retrógrado deforma la recepción del mensaje y siempre coloca palabras equivocadas en lo que se escucha.
No dejes que Mercurio te complique, llévalo con calma.
@solcire_wicca