Spider-Man: No Way Home

Hoy se estrena, finalmente, Spider-Man: No Way Home. El esperado filme de Marvel, que le pone fin a la trilogía del superhéroe arácnido interpretado por Tom Holland generó un gran revuelo tanto en Venezuela como en varios países de la región. Largas filas en los principales centros comerciales y el colapso de las páginas de web de los circuitos de cines más importantes del país caracterizaron el primer día de preventa del filme.

El pasado lunes 29 de noviembre inició la preventa para Spider-Man: No Way Home y, desde tempranas horas, los fanáticos se apostaron en las afueras de cines y centros comerciales para adquirir sus boletos: hicieron fila por un par de horas. Otros decidieron ingresar en las páginas web de Cinex y Cines Unidos para comprar sus tickets, pero algunos usuarios reportaron dificultades para pagar, pues debido a la cantidad de personas ingresando al sitio la plataforma colapsó.

Antes de su estreno, Spider-Man: No Way Home ha tenido un buen desempeño en ventas este año, superando todos los estrenos de Marvel, como Black Widow y Eternals, según Fandango, compañía especializada en venta de entradas de películas. Charlie Jatinder, analista de taquillas, detalló que los tickets vendidos en Estados Unidos superaron los 3 millones, generando ganancias superiores a los 35 millones de dólares.

En Venezuela, la preventa de la cinta también tuvo un buen desempeño, superando el de películas como Harry Potter o Avenger: Endgame. “Podríamos compararlo con los últimos dos estrenos de la saga de Avengers (año 2018 y 2019), que tuvieron un comportamiento similar; sin embargo, con Spiderman se han vendido más entradas”, dice Alberto Carrasquero, vicepresidente de operaciones y mercadeo de Cines Unidos, pero no precisa cuántos boletos se han vendido.

José Galarraga, director de Contenidos y Programación de Cinex, indica que, hasta ahora, el circuito ha vendido más de 18.000 entradas. “Hasta ahora es la preventa más exitosa, superando proporcionalmente al último capítulo de Harry Potter y a Avengers Endgame”. La mayoría de los tickets, agrega, se vendieron en Caracas.

Tanto Carrasquero como Galarraga coinciden en que no es justo comparar el desempeño en ventas de Spider-Man: No Way Home con otras cintas estrenadas antes de la pandemia, pues las circunstancias actuales son muy diferentes: aforo limitado, menos número de funciones y el temor de algunos espectadores de acudir a las salas por el covid-19. “El mercado ha cambiado y el aforo de la salas no se vende al 100%, por lo que comparar número contra número en circunstancias distintas no sería justo”, dice el director de Contenidos y Programación de Cinex.

Desde que retomaron sus actividades -en enero de este año-, ambos complejos están trabajando con un aforo de entre 40 y 50% de su capacidad. Por este motivo, el vicepresidente de operaciones y mercadeo de Cines Unidos señala que tuvieron que abrir funciones adicionales. “La demanda de entradas para este estreno es una situación extraordinaria (…) Todas las funciones están vendidas en una cifra que ronda 90% del aforo reducido que tenemos en la actualidad, debido a las normas de bioseguridad”, indica.

En enero los cines retomaron sus actividades. Desde entonces hasta noviembre, el sector cinematográfico ha vendido 1.370.000 tickets, lo que representa apenas 13% de las ventas de 2019, último año de referencia, cuando se vendieron 12 millones de boletos, explica Abdel Güerere, presidente ejecutivo de la Asociación Venezolana de Exhibidores de Películas (AVEP). Esto quiere decir que al mes se vendían un millón de tickets y a la semana 250.000. Pero en 2015 la situación era mucho mejor. Ese año el público compró 30 millones de boletos: 2.750.000 al mes y 700.000 por semana.

Sin embargo, Güerere indica que para comparar ambos años es necesario tomar en cuenta varios factores como, por ejemplo, la crisis económica, las restricciones por la pandemia o el número de complejos abiertos. Actualmente, hay 52 en funcionamiento de los 64 que estaban operativos en 2019.

La crisis económica del país ha incidido en la crisis del sector cinematográfico: el ocio y el esparcimiento ya no son prioridad.


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