El estreno de los primeros capítulos de The Idol dejó esta noche la alfombra roja más pop de lo que va de la 76 edición del Festival de Cannes. La serie de HBO sobre la fama es protagonizada por Abel Tesfaye (The Weeknd) y Lily-Rose Depp con la firma de Sam Levinson (Euphoria).
La llegada a la entrada al Palacio de Festivales del gran Starboy de la música desató la locura entre los fanáticos y curiosos que abarrotaron la Croisette, a pesar de lo tardío del estreno.
Vestido con esmoquin de corte clásico, The Weeknd firmó autógrafos y se tomó fotos con admiradores antes de reunirse con el resto de miembros del equipo sobre la alfombra. El cantante anunció recientemente su voluntad de dejar atrás el alias con el que triunfó en el mundo de la música para empezar a usar su verdadero nombre.
Su recibimiento solo fue equiparable al que tuvo la estrella surcoreana Jennie, integrante del grupo de k-pop Blackpink, que cuenta con una auténtica legión de seguidores.
Otros personajes de The Idol en Cannes
Del mundo de la música viene también otra de las grandes figuras del reparto, el cantante Troye Sivan. Presente igualmente sobre esta alfombra roja en la que no pudo faltar la banda sonora de los grandes éxitos de The Weeknd.
Lily-Rose Depp ya había estado en Cannes con motivo de la reaparición de su padre, el actor Johnny Depp, que protagonizaba a Luis XV en la película Jeanne du Barry. Una cinta de la directora francesa Maïwenn que dio apertura a esta edición del Festival.
Para la alfombra roja, la también hija de la cantante francesa Vanessa Paradis eligió vestido corto, en negro brillante, adornado con una flor en el pecho, mientras que Levinson se presentó de esmoquin blanco.
La trama de la nueva serie de HBO
The Idol, que viene anunciada como la historia de amor más sórdida de Hollywood, aborda la complicada relación entre un gurú de la autoayuda y líder de un culto moderno, interpretado por Tesfaye, y una ídolo del pop en pleno ascenso (Lily-Rose Depp).
La producción, cocreada por Tesfaye, Levinson y Amy Seimetz, viene precedida por polémicas relacionadas con el supuesto contenido gráfico y sexual, además de acusaciones de ambiente tóxico en el rodaje.
Su desarrollo también siguió un camino pedregoso, con grandes revisiones creativas y costosas regrabaciones, de acuerdo a la prensa estadounidense.
