Ryan Reynolds
Foto EFE

Después de dar vida al carismático antihéroe Deadpool (2016), el canadiense Ryan Reynolds vuelve a las pantallas como el líder de 6 Underground, un escuadrón de justicieros que cobra vida en la última entrega del director Michael Bay y cuyo rodaje supuso un «viaje salvaje» al caótico universo del cineasta.

«El rodaje fue un viaje salvaje, una experiencia increíble. Yo no cambiaría nada en absoluto, pero Michael es un caos. Él lleva el caos en su esencia», revela Reynolds en una entrevista con Efe en Sao Paulo. Allí, el actor presentó su más reciente trabajo como parte del festival de la Comic Con Experience.

«Bay graba donde le da la gana, de repente va y descarta completamente el guion. Cuando nos damos cuenta, estamos grabando algo que nadie había planeado para ese día», agrega el actor (Vancouver, 1976) entre risas.

Reynolds asegura que la cinta está algo inspirada en los días actuales y en un mundo donde, considera, el mal queda un tanto impune.

«¿Qué pasaría si sintieras que sí puedes hacer algo? ¿Si supieras que puedes evitar una intervención de algún gobierno y crear tu propia intervención? De ahí viene toda la premisa de la película», explica el intérprete.

Dirigida por el taquillero Bay, quien se ha convertido en todo un éxito tras firmar títulos como la saga Transformers o Bad Boys, 6 Underground se trata del más grande proyecto del cineasta hasta la fecha. Viene cargada de muchas explosiones, tiros y persecuciones en alto voltaje.

Aunque admita que la caótica forma de trabajar del director estadounidense pueda ser un desafío para el elenco, el actor pondera que es precisamente ese anárquico estilo de conducir el set cinematográfico lo que hace que las producciones de Bay se traduzcan en la pantalla como un gran espectáculo de entretenimiento.

«El caos es en parte la razón por la que los espectadores pueden disfrutar de un espectáculo que presenta todo ese nivel de entretenimiento. Bay es muy ambicioso», celebra Reynolds.

Estreno en Netflix

El actor no bromeaba cuando prometió, hace unos días, que la ambiciosa producción, que se estrenará mundialmente el próximo día 13 de diciembre en la plataforma de Netflix, entregará «acción sobre acción sobre más acción».

La electrizante secuencia inicial de 6 Underground brinda a los espectadores unos 20 minutos ininterrumpidos de pura adrenalina. Contiene explosiones, tiroteos, helicópteros y una persecución por las calles de Florencia. Rápidamente da el tono de lo que seguirá en las dos horas siguientes.

El que fuera protagonista de la fallida Linterna verde (2011) define los bastidores de esta macroproducción como una experiencia increíble e intensa, que llevó a que todo el elenco se convirtiera en una familia.

Además del protagonista canadiense conforman el «Escuadrón 6» la actriz francesa Mélanie Laurent, el británico Ben Hardy y el mexicano Manuel García-Rulfo. Se suman también la puertorriqueña Adria Arjona y el estadounidense Corey Hawkins.

La química en la pantalla entre los actores que dan vida a estos seis anónimos vigilantes es innegable. Reynolds lo atribuye a la buena sintonía con sus compañeros de escena también durante las grabaciones.

«Nosotros nos teníamos uno al otro, nos apoyábamos. Éramos una familia. Hemos sido forjados en el fuego y eso nos ha salvado», rememora.

Fantasía y realidad

Sin embargo, entre el sinnúmero de escenas de acción y las siempre presentes bromas de su protagonista, 6 Underground igualmente ofrece a los espectadores algunas destellos de realidad.

Al presentar un crudo retrato del mundo actual y sus crecientes desafíos, como las constantes guerras o la ascensión del autoritarismo, la película bucea en el deseo de arreglar las cosas.

«La película está un poco inspirada por el mundo en el que vivimos y esta premisa de qué podría pasar si fuésemos capaces de hacer o cambiar algo», concluye Ryan Reynolds.


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