Para Osmel Sousa el escándalo por la fiesta en el tepuy Kasuri a la que asistió se formó porque a la «gente le da rabia» que se hayan vestido de smoking y traje largo.
«Si hubiéramos ido en ropa de trotar nadie hubiera dicho nada. Total, me rayaron mi pobre traje de Dolce & Gabbana verde, que me puse en honor a la naturaleza, porque eso ya salió en todos lados», manifestó el expresidente de la Organización Miss Venezuela en su cuenta de Instagram.
Sousa dijo que todo el mundo le sugirió quedarse callado, pero prefirió hablar porque cuando lo invitaron a Canaima no dudó en decir que sí.
«Canaima es uno de mis lugares favoritos desde el año pasado, cuando hice un programa para mi concurso. Yo amo Canaima. Sería incapaz de hacer algo que lo destruya», expresó.
Afirmó que la actividad a la que asistió a propósito de los 50 años del empresario Rafael Oliveros es una forma de turismo ecológico, igual que el que, según dijo, hacen otros visitantes.
«Ahí no pasó nada», insistió. «Además, si a ustedes los llaman para invitarlos a una fiesta en Canaima, ¿van a decir que no? Y este que está aquí, si lo vuelven a invitar, iría otra vez».
La fundadora de la ONG SOS Orinoco, Cristina Burelli, advirtió que durante la fiesta en el tepuy Kusari los participantes quitaron una vegetación que no volverá a crecer.
En entrevista para el Circuito Onda, Burelli explicó que en los tepuy existe un ecosistema muy frágil que tiene más de 4 millones de años. Cuentan, subrayó, con una biodiversidad irrepetible.
«En las fotos se ve arena, eso es la desertificación, ahí no vuelve a crecer más nada. Toda la vegetación única que había en ese tepuy ya desapareció», indicó la defensora ambiental.
Luego del escándalo que se formó, el fiscal de Nicolás Maduro, Tarek William Saab, anunció una investigación sobre los daños causados en el Kusari.
A cargo de estas averiguaciones estará la Fiscalía 87 Nacional en Defensa Ambiental, según el fiscal.
Fe de errata
La periodista y relacionista Ángela Oráa se comunicó a la sala de redacción para desmentir que haya sido invitada a la celebración del cumpleaños del hotelero, muy a su pesar porque le habría encantado escribir una crónica social de altura.