Las sillas obra teatral
Las sillas, dirigida por Verónica Etienne, abrió el VI Festival de Jóvenes Directores de Trasnocho Cultural | Foto Julian Izquierdo

Una pareja de ancianos hará una reunión. El viejo quiere darle un mensaje sobre su experiencia a la humanidad. Su esposa, la vieja Semiramis, lo apoya al mismo tiempo que le recuerda lo que él pudo haber sido. Porque él es el mariscal de los Pisos, pero le enfatiza que pudo haber sido más que eso. Muchas personas están invitadas a escuchar «lo que puede cambiar el curso la humanidad», desde el Coronel del Ejército hasta viejos amigos de la infancia. Incluso llega el Emperador. Pero todos deben esperar, porque el mensaje solo lo puede dar el Orador.

Así transcurre Las sillas (1952), del dramaturgo franco-rumano Eugène Ionesco. La pieza, que inauguró el VI Festival de Jóvenes Directores Trasnocho, lleva al espectador a una historia del teatro del absurdo, estilo del que Ionesco es padre junto al irlandés Samuel Beckett. Dirigida por Verónica Etienne, de 25 años de edad, la propuesta estará hasta el 26 de enero en la Sala Plural.

Erick Palacios, de 25 años de edad, y Sara Valero, de 34, interpretan a la pareja. Los viejos parecen hablar entre ellos, pero no se entienden del todo. Entablan conversaciones superfluas con sus invitados, representados por las sillas, que parecen significar la presencia de la ausencia, pues los asistentes a la reunión solo existen para ellos.

La directora considera que la pieza «habla de la nada, de la ausencia, el vacío». El tema le parece atractivo. El texto de Ionesco llegó como una segunda opción. Desde hace años Etienne asistía a los festivales con el sueño de participar. Ahora, licenciada en Comunicación Social de la Universidad Monteávila y con algunas experiencias teatrales de la mano con Federico Pacanins, consideró oportuna esta edición. Tres mujeres altas de Edward Albee quedó descartada por derechos de autor. El teatro del absurdo llegó para continuar su experiencia en la competencia de noveles directores.

«Fue un reto escoger esta pieza. Al mismo tiempo, era algo que quería disfrutar. Quería apegarme lo más posible al texto original, a las indicaciones. Había algo maravilloso en eso y ver qué tan lejos lo podía llevar, qué le podía agregar a algo que ya existe. Un ejemplo es el simbolismo de los ojos, de ver la verdad. Me inspiré en una entrevista a Maurice Bejart, que montó la pieza en los 80. Se presta un poco para la comedia y lo trágico. Es todo lo que Ionesco visualizaba dentro de la obra», dice.

Erick Palacios fue escogido como actor desde el primer momento y por recomendaciones llegó Sara Valero. Etienne describe la dinámica con los actores como «un proceso creativo increíble. Tuvieron la oportunidad de proponer como actores lo que ellos querían. Con eso, fui llevando la propuesta que tenía en mente. Disfrutábamos tratando de entender a Ionesco».

La obra también cuenta con la participación especial de Rafael Gorrochotegui como Orador. «Yo lo llamé especialmente para hacer ese papel. Si él me decía que no, no hubiese montado la pieza», agrega. Con él, Etienne hace su contribución al cambiar el final original de la obra. «Es un momento de cierre, de paz«, indica.

La primera función estuvo agotada, la segunda casi llena y la tercera un poco más de la mitad. El festival, señala, ha sido  «una especie de cúspide en mi carrera«. «Lo que más disfruto es tener la oportunidad increíble de crear pequeños mundos, contar estas historias y poder encargarte de todos los ámbitos básicamente. Es una oportunidad única y reafirma mi amor por el teatro, porque eso es lo que hace falta en este momento: jóvenes con visión y que tengamos un espacio para expresarnos».


Las sillas
Del 17 al 26 de enero
Trasnocho Cultural
Viernes a las 7:30 pm, sábado a las 7:00 pm y domingo a las 6:30 pm
Entradas Bs 100.000


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