El escritor y profesor almeriense Juan Manuel Gil ganó este lunes por unanimidad el Premio Biblioteca Breve 2021 con la novela Trigo limpio. La obra es una combinación de falsa novela de detectives y obra de iniciación ambientada entre los años 90 y la actualidad.
Así lo anunció este lunes el jurado del premio, convocado por Seix Barral y dotado con 30.000 euros. El grupo de jurados recibió 967 originales y estuvo compuesto por Pere Gimferrer, Olga Merino, Raquel Taranilla, Elena Ramírez y Enrique Vila-Matas.
Los integrantes del jurado destacaron de la obra la prosa ágil del autor, el rescate de la infancia sin edulcorar, un humor gamberro y cervantino y la ambientación de la novela en la periferia.
La novela, que se publicará el 10 de marzo, parte de la imagen del narrador en su niñez corriendo en busca de un balón por la pista de aterrizaje de un aeropuerto. Años después convertido en escritor recibe un correo de un excompañero de clase que desapareció del barrio para que escriba sobre la infancia que compartieron. La invitación lleva al narrador a investigar al ver allí una novela.
Gil explicó que intentó trasladar con la novela su amor a la literatura, con los pasadizos que conectan unas obras con otras, y señaló que en su obra la desaparición es un tema nuclear.
«La desaparición forma parte de mi universo literario. Es muy fecunda», señaló, por lo que la desaparición del compañero que se va del barrio lleva al narrador a explicar el porqué del arrepentimiento y los secretos que esconde.
Nada es lo que parece
El escritor señaló que en todo momento quiso establecer un juego con el lector, al que el narrador intenta seducir. Subrayó además que en la novela nada es lo que parece, desde el propio título Trigo limpio hasta la voluntad de jugar con el lector a la confusión.
Gil remarcó que la novela está trufada de episodios ligados a su vida, guiños a escritores a los que admira y la constelación de libros que le gustaron. «Todos llevamos dentro una serie de libros que nos han marcado», añadió.
Explicó además que con la consecución del Premio Biblioteca Breve mejoró su sueño, y dedicó el galardón a todos aquellos que sufrieron en estos tiempos, a su barrio y a su madre, a quien considera vital para haberse dedicado a la literatura.