Bailey Ariel
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Lo único que hizo Halle Bailey el día que supo que el director Rob Marshall y el productor John DeLuca la habían escogido  para interpretar a Ariel en el live action de La Sirenita fue llorar. Lloró durante toda la tarde y siguió haciéndolo al día siguiente: no podía creerlo. Tampoco podía creer que había estado a punto de no responder la llamada de los responsables de la nueva película de Disney ya disponible en todas las salas del país. En su primer fin de semana, tras cuatro días en cartelera desde su estreno el pasado 25 de mayo, la cinta registró 37.468 espectadores. Fue la segunda película más vista en el país después de Fast X que registró 41.372 espectadores. Así lo reveló el presidente de la Asociación de la Industria del Cine (Asoinci), José Pisano.

En una rueda de prensa posterior al estreno mundial de la cinta el pasado 10 de mayo, la joven actriz, cantante y compositora de 23 años de edad confesó que no pensaba responder a esa llamada que le cambió la vida. Era de un número desconocido. Fue su hermano menor, Branson, de 17 años de edad, quien le insistió que atendiera. “Hola, estoy buscando a Ariel”, le dijo Marshall cuando respondió. Entonces, comenzaron las lágrimas.

Tenía 18 años en ese entonces. Su elección como protagonista de la nueva versión del  clásico animado de Disney estrenado en 1989 se hizo oficial el 3 de julio de 2019. La noticia causó una ola de comentarios de todo tipo, algunos buenos, otros no tanto. Sin embargo, al hablar de la película basada en el cuento de 1837, escrito por Hans Christian Andersen, Halle Bailey no toca ese tema. Se enfoca en lo bueno, en la familia que hizo con sus compañeros de elenco e incluso menciona anécdotas divertidas durante el rodaje. Sobre todo, la intérprete destaca lo mucho que creció como mujer durante el proceso.

“Digo esto todo el tiempo: siento que Ariel me ayudó a encontrarme a mí misma en estos últimos 5 años de mi vida. Comencé a trabajar en la cinta a los 18 y ahora tengo 23. Fueron unos años intensos de desarrollo”, confiesa. Bailey asegura que los temas que se tocan en la película, el viaje que hace Ariel para poder hablar por sí misma y luchar por lo que desea dejaron una huella en ella. Ariel, asegura, aunque puede sentir miedo, lucha por lo que quiere. “Siento que traté de adoptar eso y dárselo a la Halle de ahora. Me enseñó mucho, sin duda”.

La nueva princesa de Disney se siente orgullosa de lo que logró con la cinta. Su hermana mayor, Chloe Bailey, con quien mantiene un estrecho vínculo y un dúo musical llamado Chloe x Halle,también está orgullosa de ella. En el encuentro con los medios, en el que participó El Nacional, la actriz asegura que su hermana lloró durante toda la premier de la película, no podía con la emoción. “Estuvo toda la proyección tomándome la mano. Ya puedo darme palmaditas en la espalda porque a mi hermana mayor le encantó mi trabajo”.

Humanizar un gran clásico

El elenco de La Sirenita, además de tener a Halle Bailey como Ariel, está integrado por Jonah Hauer-King como el príncipe Erick, Melissa McCarthy como Úrsula y Javier Bardem como el rey Tritón. Jacob Tremblay se unió para darle voz a Flounder, Awkwafina  es Scuttle y Daveed Diggs  es Sebastián. En el reparto también figura  Noma Dumezweni en el papel de un personaje nuevo: la reina, madre del príncipe Erick. En el encuentro con los medios los actores comparten entre risas y bromas lo significativa que fue la película para ellos. Todos coinciden en afirmar que, a pesar de los retos y lo intimidante que puede ser formar parte de uno de los live action más esperados, el rodaje fue divertido y emocionante. Más de uno destacó que, cuando filmaban, se sentían cómodos. Terminaron por convertirse en una familia.

Bailey Ariel
La reina | Foto Archivo

“Estuvimos todos juntos durante bastante tiempo en el estudio en Inglaterra y terminamos por conocernos muy bien. Eso definitivamente ayudó mucho con el trabajo de la voz”, comenta Jacob Tremblay, de 16 años de edad. El actor vio la película original muchas veces antes de grabar porque quería asegurarse de que, cuando la gente la viera, reconociera a Flounder. “Hay muchas cosas que tuve que encarnar, como su ansiedad, pero al mismo tiempo, quería asegurarme de hacerlo mío”, comenta.

En su caso, su personaje tenía una representación elaborada y significativa en la versión animada en la que se basó. Algo con lo que no contó la actriz Noma Dumezweni. Para ella fue diferente, tuvo que confiar ciegamente en el equipo y en las personas que trabajaban en el proyecto para interpretar el papel. “Confié en el cast del director. Lo que hice fue simplemente confiar en las personas con las que trabajo”.

Durante el proceso de filmación, Dumezweni fue apoyo constante para Hauer-King, lo que el actor describió como un gran honor. “Ella simplemente puso un brazo a mi alrededor y fue muy buena conmigo en las grabaciones. Es muy especial porque toda la película está muy apegada a la realidad. Es divertido y emocionante, me di cuenta de que para todos nosotros este espacio de fantasía se siente realmente conectado con el mundo real”.

En eso coincide con él Melissa McCarthy. La actriz, que en la cinta muestra los tentáculos de Úrsula como si fueran suyos, asegura que con La Sirenita humanizaron personajes animados. En lugar de ser una extensión de la caricatura que ya el público conoce, los actores le dieron humanidad y profundidad a la historia. “Son personajes con los mismos problemas y preocupaciones que los del mundo real. Creo que esa es la gran diferencia: trajimos humanidad a la pantalla”.

Bailey Ariel
Úrsula | Foto Archivo

Una canción de amor al mar

El estreno mundial de La Sirenita fue, en palabras de su director Rob Marshall, “un sueño hecho realidad” no solo para Bailey interpretando a Ariel sino para todo el equipo. En el encuentro con los medios el cineasta se refirió a la energía tan significativa que los arropó esa noche cuando vieron en la gran pantalla la culminación de cuatro años y medio de trabajo. “Fue muy emotivo. Nos ha llevado años esta película… el estreno fue increíble”.

En la cinta, que sigue fielmente los sucesos narrados en la versión animada, hay un par de añadidos que suman a la historia: los productores del live action decidieron incluir nuevas canciones. Marshall comenta que todo el equipo había trabajado en teatro. “Los musicales son una especie de híbrido divertido. Las películas musicales son un híbrido de teatro y cine. No puedes simplemente entrar y empezar cantando. Tienes que aprender a hacerlo”.

Fue por eso que como director trató de que sus actores se sintieran cómodos  en los números musicales, una parte esencial de la historia. “Mi trabajo como director es proteger a los actores. Hacer que se sientan seguros en un espacio donde pueden equivocarse y ser terribles. Entonces mejorarán porque no se sienten juzgados”. Solo así fue que lograron hacer las escenas musicales por más presión que sintieran los intérpretes, en especial la nueva canción del príncipe Erick, “Wild Uncharted Waters”.

El elenco en la premier | foto Archivo

Hauer-King señala que fue increíble poder grabar esa escena. “Es horrible tener que cantar en una película donde hay una artista nominada al Grammy. Eso no es divertido para nadie. Pero, sí, fue increíble ver la reacción de la audiencia a la música una vez se estrenó la película”.

El compositor Alan Menken, quien trabajó en el soundtrack en conjunto con Lin-Manuel Miranda, destacó que crear la música fue un proceso grupal. Tuvieron que analizar la estructura de la historia para luego preguntarse dónde estaban los puntos potenciales. Luego, tomaron las decisiones.

“Buscamos los puntos potenciales por personaje, por momento, pero también por secuencia de una partitura y lo que se necesita en un momento determinado. Así que elegimos el momento en que al Príncipe Erick le dijeron: «No vuelvas a salir, no puedes«, y él solo piensa en esta chica. Canta una canción de amor para ella, que también es una canción de amor para el mar y sus aguas desconocidas”, revela Menken.

Ese amor entre los protagonistas, en palabras de Hauer-King, viene de una amistad entre dos espíritus que son afines. “Ambos se sienten un poco inquietos, sienten que están detrás de las cuatro paredes de sus respectivos castillos y miran mucho hacia afuera y no hacia adentro. Su relación se siente realmente natural. Ambos sintieron que se estaban enseñando cosas el uno al otro. Estaban emocionados y fascinados por los mundos del otro aunque no lo supieron hasta el final. Eso fue realmente encantador porque pienso que es un muy buen mensaje de lo que significa estar enamorado y lo que significa estar en una relación: está ligada al final con la amistad”.

Ariel y Erick en la película | Foto Archivo

Cerrar los ojos y cantar

Cuando Rob Marshall se refiere a la elección de Halle Bailey como Ariel recuerda que, durante la audición, la joven entró, cerró los ojos y cantó “Parte de él”. Lo que sintieron al escucharla fue inexplicable. “Solo pude pensar que estaba profundamente conectada con lo que estaba cantando. Es tan emotivo. Es tan hermoso”, recuerda que pensó. Bailey hizo suya la canción y, con eso, reclamó el papel como propio. Esa misma emoción se repitió cuando Alan Menken vio la cinta finalizada. Al escuchar la pista montada en la película después de las grabaciones, tuvo que pedir que le trajeran pañuelos: no podía parar de llorar.

Bailey Ariel
Bailey conquistó cantando parte de él | Foto Archivo

El resultado los conmovió y los llenó de orgullo. Emprendieron el proyecto partiendo desde el inicio: la historia de Hans Christian Andersen para entender de dónde venía todo. “Inmediatamente nos dimos cuenta de que ésta era una historia muy contemporánea ya en la década de 1830 sobre esta joven que se siente desplazada y quiere emprender un viaje de autodescubrimiento”, comenta el director.

En el proceso se cuenta la relación padre e hija que marca la historia. “Las escenas son en cierto modo una pequeña historia. Se muestra a un padre aprendiendo a dejar ir, y estos dos espíritus afines aprenden a cambiar el mundo y no tener miedo de lo que es diferente a ellos”, añade Marshall.

Bailey Ariel
El rey Tritón | Foto Archivo

Ese vínculo padre-hija, comenta el actor encargado de interpretar a Tritón, Javier Bardem, se dio desde el inicio con Bailey. “Justo en el momento en que la conocí, simplemente me enamoré de ella. Ella tiene algo… simplemente no puedes evitar amarla incondicionalmente. El resto fue solo divertirse y disfrutar el proceso”, confiesa. Para él fue fácil interpretar al rey del océano y así vínculo con su hija rebelde porque había una buena conexión con Halle Bailey. “Me cautivó su calidad como intérprete y más como cantante. Como actriz fue dispuesta y valiente, fue a los lugares a los que tenía que ir y eso fue asombroso”.


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