Falleció el poeta y ensayista Guillermo Sucre

Profesor y crítico literario, el escritor nacido en Tumeremo fue autor de dos libros que son referencia para los estudios de poesía hispanoamericana: Borges, el poeta y La máscara, la transparencia. Tenía 88 años de edad

El poeta y ensayista Guillermo Sucre Figarella, uno de los autores más importantes de su generación, falleció este jueves a los 88 años de edad.

Guillermo Sucre, nacido en Tumeremo, estado Bolívar, el 15 de mayo de 1933, es autor de Borges, el poeta y La máscara, la transparencia, textos de crítica literaria que son referencia para los estudios de poesía hispanoamericana. Por el segundo título recibió en 1976 el Premio Nacional de Literatura.

Entre sus libros de poesía se encuentran Mientras suceden los días, La vastedad y La segunda versión (poesía reunida).

La poesía de Sucre, señala el profesor Luis Miguel Isava en un artículo crítico publicado en la revista Cuadernos hispanoamericanos, «invita a una exploración de la interrelación de lo sensorial y de la conciencia a partir de un uso crítico del lenguaje».

Este uso crítico del lenguaje, continúa Isava, «no implica solo una opción estética, sino ética, puesto que responde antes bien a la negativa de aceptar sin examen las ilusiones, las trampas que el lenguaje ha creado, condenándonos a una realidad inventada».

Docente y crítico literario, Sucre es licenciado en Letras por la Universidad Central de Venezuela, institución en la que dio clases y que en 2009 le entregó el doctorado honoris causa.

Hizo estudios de posgrado en Francia y, luego de ganar la beca Guggenheim, dio clases y fue investigador en Washington y Pittsburgh.

Fue fundador del primer posgrado en literatura de la Universidad Simón Bolívar, casa de estudios que el año pasado también le otorgó, junto con Rafael Cadenas, el doctorado honoris causa.

Cuando recibió el reconocimiento Sucre ofreció un discurso, que está disponible en la revista Prodavinci, donde recordó, entre otros, los 12 años en los que trabajó como profesor en la USB y cuando estuvo preso junto a Cadenas hace casi 70 años.

«Nos llevaron inicialmente a la cárcel del Obispo, que quedaba en el Guarataro —no sé si ahora existe—. Era una cárcel para presos comunes, horrible, sin patio y por eso nunca recibíamos sol», dijo.

Evocando las palabras de Don Quijote de la Mancha sobre la libertad («La libertad, Sancho, es el bien más grande que los cielos y la tierra han dado a los hombres»), Sucre afirmó que en la actualidad la lucha por la libertad y la autonomía universitaria continúa: «Hoy defendemos esa misma libertad, la libertad de cátedra, la libertad de palabra y esa autonomía que se expresa en la frase del Quijote y en lo que Montaigne consideraba esencial en la educación», dijo.


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