En tiempos de hiperconexión, toneladas de imágenes y superficialidad, Daniel Chacón Aro, Dankco, como firma sus obras, presenta una serie fotográfica en el Centro Documental de la Sala Mendoza que obvia las figuras concretas y profundiza en aquello que no se puede ver a primera vista.
No hay en las fotos de Dankco paisajes monumentales, personas posando u objetos de la cotidianidad. Lo de este artista y escritor caraqueño es utilizar su cámara como un instrumento de pintura que salpica y traza sombras inmersas en la nada. Aquello que quizás está detrás de la superficialidad de las imágenes en las redes sociales.
Titulada Sinalmidad, se trata de siete piezas de un total de 15 en las que el autor explora tránsitos, término que utiliza para referirse a aquello que registra con su cámara. La palabra que usó para darle título a la muestra, sinalmidad, es un neologismo empleado por la escritora mexicana Cristina Rivera Garza para traducir soullessness, término que es utilizado por la antropóloga Elizabeth Povinelli para referirse a la ausencia de vida en la Tierra.
Haciendo su propia interpretación, Dankco considera que una característica del ser humano en la actualidad es la sinalmidad, tomando en cuenta el individualismo, el egoísmo y las dificultades para establecer relaciones. También porque, como persona neurodivergente, el escritor siente que este tiempo de sinalmidad es un tiempo de «residencia», es decir, «un lugar de estar».
«Vienes a un lugar y la neurodivergencia te lleva a esa sinalmidad. Ese espacio de tiempo – lugar en el que estarás sin alma aislado», explicó.
Su trabajo fotográfico y su poesía están fuertemente relacionados. «valía», poema con el que ganó el segundo lugar del Concurso Rafael Cadenas, es tan oscuro como la serie Sinalmidad.
Dice un fragmento: «El grito del polvo se nos queda pegado en los dientes cuando nos comemos el susto. / querer asistir al futuro es querer jartarse de mentiras. / vemos nuestra sombra rota y nos revisamos buscando dónde tenemos la fractura. / sin saber que no es en la gruta sino en la hendidura donde reposa el pulso que nos arrastra».
De hecho, dijo que si en un futuro publica un libro espera poner en la portada algo de la serie Sinalmidad. «Podríamos decir que algunas personas usan el arte para huir de la oscuridad. Yo lo uso para abrazar esa oscuridad, congeniar con ella, habitar con ella. Está infinitamente relacionado mi acto poético con mi acto fotográfico, y al final yo considero mi acto fotográfico un acto poético en sí».
Sin embargo, Dankco, de 31 años de edad, no se siente ni escritor ni fotógrafo. «No me considero ni lo uno ni lo otro. Me gusta mucho el término realizador. Hago cosas. También pinto. Hago cosas», expresó.
Licenciado en Letras por la Universidad Católica Andrés Bello, actualmente es tesista con un trabajo sobre Arca en la maestría de la Universidad Simón Bolívar. Hasta ahora no ha publicado un libro de poesía, pero sí tiene pensado hacerlo. Cuenta con un título inédito de poemas y una novela escrita en clave poética en la que explora la vida de aislamiento de un individuo cuyo nombre nunca se menciona.
Además de la exposición en la Sala Mendoza, este año ganó el Premio Único de Fotografía del 14º Salón de la Coexistencia coordinado por Espacio Anna Frank y fue galardonado con la Selección del Jurado en la convocatoria internacional de fotografía abstracta del New York Center for Photographic Art.
Sinalmidad estará abierta hasta enero de 2024.