La euforia que causó Luis Miguel tras anunciar su regreso a los escenarios se vio empañada por un escándalo. El pasado 8 de marzo la revista española Diez Minutos aseguró que existía una orden de aprehensión en contra del cantante, resultado de una demanda presentada por su expareja Aracely Arámbula por la manutención de sus dos hijos menores.
Horas más tarde el abogado de la actriz, Guillermo Pous, explicó que aunque sí existe un asunto legal con el llamado «Sol de México», no hay ninguna intención de detenerlo; por si esto fuera poco, el propio artista, a través de sus redes sociales, calificó dicha información como falsa.
Pero estas no fue la única manera en la que el intérpete de «Entrégate» intentó limpiar su nombre, ya que recurrió a sus abogados para tomar acciones legales en contra de la publicación y hasta la obligó a retractarse.
«Diez Minutos aclara la información» sobre Luis Miguel es la nota con la que la revista se desmiente y sostiene que a petición de uno de los representantes legales del cantante rectifican su información: «No es cierto que pese una orden de arresto sobre Luis Miguel. Con relación a la noticia publicada por Diez Minutos el 8 de marzo de 2023, Luis Miguel afirma (a través de sus representantes legales) que en ningún caso pesa sobre su persona una orden de arresto, ni mucho menos relacionado con la manutención de sus hijos».
Esta petición fue hecha mediante un comunicado que TVyNovelas sacó a la luz y en el que se puede leer que el cantante pide respeto a su imagen, su honor y privacidad: «La publicación le ha causado y le está causando graves perjuicios, tanto en la vida personal como profesional de nuestro cliente, además de haberse difundido masivamente en diferentes medios», señala.
Incluso, piden que paren las ventas de la revista con la intención de que «cesen de su actuación y del engaño a los lectores, en aras de la protección de sus intereses, así como el de sus hijos menores de edad a los que también hacen alusión”, continúa el documento.
Asimismo, el abogado aseguró que la intención de su cliente es regularizarse con el pago de los gastos de sus hijos, algo que podría suceder ahora que comience los conciertos que ya tiene programados.