Charli D'Amelio

Tiene 16 años y en pocos meses se convirtió en la reina de la exitosa y polémica red social TikTok. Con más de 50 millones de seguidores y contratos jugosos, Charli D’Amelio ya llamó la atención de estrellas como Jennifer Lopez, pero ¿quién es esa chica?

Para muchos, el gran descubrimiento de la cuarentena obligatoria por el covid-19 fue TikTok. Un verdadero fenómeno en redes sociales al que se sumaron famosos y en donde se pueden encontrar desde coreos, retos, challenges hasta imitaciones de frases populares.

Pero malas noticias, no descubrimos nada (más bien llegamos tarde) porque esta aplicación, que hoy se convirtió en una de las más descargadas junto a WhatsApp e Instagram, no es nueva. Ya desde el año pasado viene siendo furor entre los más chicos y adolescentes y toda una industria gira a su alrededor.

¿El eje? Contenido audiovisual, corto, sin demasiada producción ni escenografías (más bien videos caseros frente a un espejo o en cualquier espacio de la casa), con algún filtro divertido y un hashtag en tendencia, que llame seguidores.

¿Cómo destacarse entonces entre tanto video repetido? Charli D’Amelio, una joven adolescente de 16 años, parece tener la receta.

No hace magia ni muestra nada distinto al resto de las chicas de su edad, que se pasan horas grabando pequeñas rutinas de baile frente al espejo, pero algo en ella sin duda es atrapante y el resultado está a la vista: en menos de un año, esta tiktoker trepó hasta superar la barrera de los 50 millones de seguidores.

Y el contador no para, con cada publicación, se anota de a miles. Al momento de publicación de esta nota, la seguían 53,7 millones de personas, pero en unas horas todo puede cambiar y esta cifra podría quedar desactualizada, pues los seguidores le brotan de a 500 mil.

«Sólo tienes que ser auténtico. No puedes forzar una sonrisa, tienes que hacer lo que realmente te divierta», le dijo a Jimmy Fallon cuando el presentador la invitó a su programa. Al mismo sillón en el que se sientan figuras de todo el mundo.

La reina del baile

Dicen que una vez que entras es difícil salir. La aplicación, de origen chino, es realmente adictiva ya que los videos duren apenas los segundos que nuestra atención puede captar, no aburre jamás.

Y así comenzó a transitar ese camino Charli D’Amelio a mediados de 2019. Primero fue espectadora y luego se animó a subir sus propios videos. Nadie se esperaba que semanas después y quizás sin que ella fuera del todo consciente, alrededor de su imagen se edificara un imperio a tal punto que sus padres, su hermana y hasta sus cuatro perros participan activamente del negocio. Porque en todo fenómeno web siempre surge la oportunidad de monetizar cada acción, así que mientras sus seguidores se multiplican y las marcas se interesan en ella, la cuenta bancaria familiar ya no tiene techo.

Prada la invita a sus desfiles; Dunkin Donuts auspicia sus desayunos y en esta subida meteórica a la fama cumplió varios de sus sueños: fue telonera de los Jonas Brothers en el tour Happiness Begins, formó parte de la publicidad en el medio tiempo del Super Bowl y hasta grabó una coreo en tik tok bailando a la par de su máxima ídola: Jennifer Lopez.

Charli D’Amelio nació el primero de mayo de 2004 en Norwalk, Connectitut. Es hija de Heidi, una exmodelo, y de Marc, un emprendedor que en el pasado tuvo aspiraciones políticas. Siempre supo que sería bailarina por eso desde pequeña trabaja duro para lograrlo.

Junto a ella siempre está su hermana Dixie, de 18 años, también tiktoker y bastante popular, aunque con la mitad de seguidores. Si bien son muy parecidas físicamente, la mayor de las D’Amelio persigue una carrera de modelo y espera que esta app rinda frutos y la ayude a instalarse en el ojo de los grandes diseñadores.

Las hermanas también son solidarias: hace unas semanas se unieron a una campaña de Unicef para concientizar sobre el ciberacoso. Ellas también son blanco de los heaters, esa legión de «odiadores» que comentan sin piedad y sobre los que aún no hay legislación.

La familia completa tiene un contrato con la agencia de talentos UTA. Sus cuatro perros Belle, Rebel, Cali y Codi también tienen seguidores en todo el mundo y forman parte del mapeo virtual. En la actualidad, las dos adolescentes dividen su tiempo entre Connecticut, donde viven con su familia, y Los Ángeles, base de operaciones de los Hype House, una central de talentos.

Una fábrica de influencers

La Hype House está en Beverly Hills y fue adquirida en diciembre de 2019 para explotar aún más el negocio. Se trata de una enorme mansión con piscina en la que viven algunas de las estrellas más comentadas de TikTok. Entrar a la casa fue sencillo: los reclutadores buscaron a chicos que reúnan las condiciones (ser adolescente, talentoso, levantar polvareda en las redes y cumplir con los estereotipos hegemónicos de belleza) y pasar por una producción de fotos. Nadie en esa casa tiene más de 21 años.

Los tiktokers básicamente se filman durante todo el día en los diferentes espacios. La casa es una oficina, aunque parezca Disney porque tienen piscina, camas elásticas, espejos y todo tipo de entretenimientos. Allí, además, tienen reuniones de equipo e individuales para definir sus perfiles, diferenciarse unos de otros, complementarse y no subir el mismo contenido. Llegar a vivir allí es básicamente ser tocado con la varita mágica de la industria, un pase casi automático al éxito. Formar parte de este team no es imposible siempre están buscando nuevos talentos.

Las reglas son claras: solo se pueden quedar en la mansión si participan en la producción de contenido, teniendo una media de 3 videos por día; a la casa pueden invitar a amigos, pero sin interrumpir el trabajo de los otros y si se rompe algo, quien lo hace debe reponerlo en 15 días. Además, si algún miembro tiene pareja, tendrá que evitar ser filmado con otra persona a solas para no generar rumores. Todo perfectamente cronometrado.

View this post on Instagram

Merry Christmas from The Hype House Photos by @bryant

A post shared by Hype House (@thehypehousela) on

Si bien Charli y su hermana no viven ahí, van casi a diario. Allí graban contenido que suben a sus cuentas o generan stock para subir el resto del tiempo. También interactúan con otros colegas y retroalimentan sus cuentas compartiendo momentos y retos de baile. No sólo se produce material para esta red social sino también para YouTube e Instagram, las plataformas que más facturan.

En una entrevista la joven sostuvo que si bien sube mucho contenido diario, cuando no tiene ganas sencillamente ese día no graba. Medio improbable en esta máquina en la que ya poco está librado al azar.

Un amor con millones de seguidores de testigo

Charli D´Amelio y Chase Hudson

En esa mansión D’Amelio conoció a Chase Hudson, su novio de 17 años. En todas sus redes hay muchos videos juntos y sobre todo fotos, ya que durante estos meses fueron retratados por Bryant Eslava, el fotógrafo de moda.

Él también es un fenómeno de las redes sociales con casi 20 millones de seguidores y si bien anunciaron su separación a principios de abril, fue una pieza fundamental para disparar a los fanáticos de todo el mundo. Los adolescentes los aman y vieron nacer el amor al ritmo del algoritmo así como ahora viven su separación como si fuera propia.

«Hola chicos, como han sido testigos de nuestra relación desde el principio, he decidido que necesitaba contarles que ya no estamos juntos. Me duele decir esto, pero hemos decidido que era lo mejor para los dos. Todavía somos amigos y no cambiaría eso por nada. Siento mucho amor por Chase y le deseo lo mejor, me hace feliz todas las cosas buenas que le ocurran. Perdón por haber tardado en contarlo, quería procesarlo bien antes. Las rupturas son duras para todos, así que preferiría no hablar más de ello», anunció Charli en sus stories de Instagram. Su ahora ex hizo lo propio por el mismo canal de comunicación.

Se supone que comenzaron a salir en enero pasado, pero los fans de los tiktokers más famosos del mundo detectaron que había complicidad algunas semanas antes del fin de 2019. Aun así, no fue hasta 2020 cuando Chase publicó una foto con un texto más claro, haciéndolo así oficial. En cuestión de minutos consiguió más de un millón de «me gusta». ¿El texto en cuestión? «No puedo parar de mirarte». Algo así como les pasa a más de 50 millones de personas alrededor del mundo.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!