El cortometraje Antílope muestra la cotidianidad de una migrante en Nueva York en un ambiente de pesadez e inmovilidad que resalta con planos en blanco y negro | Foto cortesía

El invierno llegó a Nueva York y para Igua, una migrante venezolana, es aterrador. Fuma cigarrillos porque la ayuda a mantener el calor y trabaja como mesera. Venezuela siempre está. Por nota de voz su mamá le dice: “Caracas, bueno, complicada, como siempre”, y le cuenta que su abuela no está bien de salud, que no consiguen los medicamentos. Cosas de la cotidianidad es lo que muestra el cortometraje Antílope (2019), de Diego Murillo, en un ambiente de pesadez e inmovilidad que resalta con planos en blanco y negro.

Se estrenó en el Festival de Sitges e inició un recorrido por otras citas cinematográficas. También compitió en el Festival Manuel Trujillo Durán, en Maracaibo, y obtuvo mención especial en el Premio Diego Rísquez en su primera edición. Ahora forma parte de la selección oficial de cortometrajes del Festival de Cine Venezolano, una categoría inédita dentro del evento que le abre paso a otros formatos.

Antílope (2019)
Diego Murillo
Género: cortometraje ficción
13 minutos
Proyección: del 11 al 23 de septiembre

Entradas en Trasnocho Cultural

Protagonizado por Amanda Isea, quien también coescribió la historia con Murillo, está dedicado a los migrantes y está inspirado en la experiencia de esta dupla que se abre paso en la ciudad de Nueva York. “Quisimos partir de experiencias cercanas y reales modificando algunas cosas, pero manteniendo su esencia. También ir un poco más allá y que no se quedara en el relato de la migración al darle un toque fantástico, donde resalta la atmósfera y el sentimiento de pesadez que ocurre cuando esas situaciones pasan. Creemos que el cine es el lenguaje ideal para indagar en esos estados entre lo real y lo fantástico, lo onírico y lo concreto”, explica el director.

Todos los elementos de su cotidianidad estuvieron dispuestos para la producción: el cuarto donde vivían, el restaurante donde trabajaban, las calles que transitaban.

El título Antílope es alusivo al ñu, un animal que pertenece a la especie de los antílopes africanos, que suele tener migraciones masivas y duras. “A nosotros nos gusta ver documentales de naturaleza y siempre nos impactó la migración de esta especie. Consideramos que engloba el proceso migratorio en una palabra corta”, dice.

Diego Murillo (Caracas, 1993) lleva cuatro años en Nueva York, donde está Amanda Isea, compañera e trabajo y pareja. Estudió Comunicación Social en la Universidad Católica Andrés Bello y poco tiempo después de graduarse decidió irse a Estados Unidos.

Al principio, cuenta, trabajó en restaurantes y también como fotógrafo, lo que le permitía pagar la renta y ahorrar un poco para invertir en los proyectos. En el caso de Antílope, crearon un crowfounding en la plataforma Indiegogo, en la que recaudaron casi 28% de los fondos. Más allá del aporte económico, sirvió para que otras personas se fijaran en el proyecto. “Me contactó gente para trabajar en la posproducción e hice conexiones con personas que ahora me apoyan y con las que pienso trabajar”, indica.

Inicialmente también querían filmarlo en 16mm, un formato del que rescata la textura, el grano y la estética. Pero al final se decantaron por el rodar en digital, un trabajo que se hizo en dos días.

Como un joven que intenta abrirse paso en un mundo competitivo lleva consigo siempre una frase que le dijo un director: “El cine es una carrera de resistencia, no de velocidad”. Al respecto añade: “El proceso es lento, toma tiempo.El cine es mucho trabajo fuera del set, es trabajo de computadora, es trabajo de relaciones humanas, es trabajo de visitar locaciones. Abarca muchísimo más que la grabación, es un oficio que requiere de preparación para poder aprovechar las cosas que surgen de la nada”.

También resalta la importancia de crear conexiones con las personas. “Llegarle a la gente, escribir correos, en redes sociales, sin problema, sin pena, es fundamental. Yo le escribí como a 25 directores de fotografía y el que me respondió fue el que utilizamos, Brandon Yoon”.

Actualmente Isea y Murillo coescriben un largometraje que dirigirá él y un cortometraje del que se encargará ella.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!