No da un paso Alejandro Hidalgo sin que se le acerque alguien para pedirle una foto o un video. El director de El exorcismo de Dios, la película venezolana más taquillera internacionalmente, ha sido una sensación en la edición 18 del Festival del Cine Venezolano, que se realiza en Mérida desde el pasado domingo.

El primer día de proyecciones, el lunes 18, Hidalgo estuvo en el Multicine Las Tapias para ver las películas del festival, entre ellas La caja de Lorenzo Vigas, presentada fuera de competencia en la sección Proyecciones Especiales; Jezabel de Hernán Jabes y, su propio filme, El exorcismo de Dios.

El director se mostró abierto a hablar con los estudiantes, cineastas o productores que se le acercaban. En el oscuro pasillo del Multicine Las Tapias, donde funcionan las salas 2 y 3, se veían asistentes haciendo cola para entrar a ver una película o reunidos alrededor de Hidalgo.

«¿Y ya te tomaste una foto con Alejandro?», se escucha decir constantemente a algunos cinéfilos. No por nada una de las películas que acumuló mayor cantidad de público al inicio del festival fue El exorcismo de Dios, una admiración que se hizo más notable cuando el cineasta ingresó a la sala ovacionado por el público.

Quienes no tuvieron la oportunidad de verlo en el cine pudieron escucharlo en su taller Desarrollo de proyectos y distribución internacional, realizado en el Hotel Serrano, en la avenida Los Próceres. A casa llena, Hidalgo ofreció una conferencia basándose en la propuesta de su próxima película, el remake de La casa del fin de los tiempos, para explicarle a los asistentes los distintos pasos que debe dar un cineasta al momento de presentar un proyecto en búsqueda de presupuesto.

Durante la clase, en la que el director contestó todas las preguntas de los asistentes, fue insistente en la importancia de la seguridad que debe tener cualquier persona dedicada al cine, sin importar si ya se tiene o no una película lista. «La seguridad es el primer paso. Si un productor pregunta qué es lo que estás trabajando pero no te sientes director, no vas a avanzar», expresó Hidalgo.

Entre los temas que abordó, ante la mirada atenta de los talleristas, estuvieron los tipos de financiamiento, la forma correcta de presentar un presupuesto, el pitch a la hora de mostrar el proyecto, la escritura sinóptica de la historia, entre otros. También mencionó algunas anécdotas para ilustrarle a los estudiantes cómo deben aprovechar las oportunidades.

«Es importante el pitch. A veces te encuentras a alguien en una fiesta y tienes que volarle el coco en tres minutos. Yo me conseguí a (Christopher) Nolan en una feria en Malibú. Estaba con el teléfono y me lo topé de frente, pero no tenía el pitch preparado, entonces le tomé una foto de fan cuando pude tener una conversación más importante. Pero bueno, ya seguramente la vida me llevará ahí otra vez», contó Alejandro riéndose con los talleristas.

Así como ofreció detalles sobre la parte técnica, se centró mucho en decirle a los estudiantes que confíen en sí mismos: «Es importante creer en uno mismo. A mí me vieron como un chico venezolano que apenas hablaba inglés, pero les estaba pichando con pasión, hice una presentación y me aceptaron para dirigir mi película».

Incluso les sugirió hacer ejercicio, pues, reconoció, el cine es una carrera que puede ser agotadora. «Todos los que somos directores deberíamos hacer mucho yoga, ejercicio, alimentarnos bien, pues te desgastas tanto en el desarrollo como en el rodaje».

Recomendó la mayor rigurosidad posible al momento de presentar un proyecto. «En este caso no diremos menos es más, sino que más es más. Que no falte información en sus propuestas», dijo.

Hidalgo dice sentirse conmovido por la receptividad que ha tenido en Mérida. «Es emocionante porque pestañeo y me veo en ese lugar con el sueño de hacer cine. Sé que todos acá tienen un talento enorme. Trato de compartir mi película y conocimientos para que se inspiren y hagan grandes obras».

Entre los asistentes al taller estuvo Gilberto Polo Pacheco, profesor de la Facultad de Arte de la Universidad del Zulia. Para él, los temas abordados por Hidalgo son esenciales para el cine venezolano. «Muchas veces nosotros, por flojera, inexperiencia o no querer abarcar todo, perdemos oportunidades. Y como dijo Alejandro, hay que ser fastidioso a la hora de revisar una propuesta».

Mientras que Dayana Salas, estudiante de Comunicación Social de la Universidad de Los Andes, expresó: «Me pareció que el taller fue una oportunidad muy grande para aprender de temas como la distribución cinematográfica o la parte del marketing. Creo que en las escuelas de Comunicación Social y Cine se debería estudiar profundamente estos temas».


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!