Dicen que no puedes ser considerada una verdadera celebridad si no tienes una propiedad en Beverly Hills, y Adele lo sabe. En los últimos 5 años la artista británica adquirió 3 inmuebles en California y se espera que a fin de mes cierre la compra de la antigua casa de Sylvester Stallone.
El protagonista de Rocky recientemente adquirió una propiedad en Palm Beach, Florida, por 35 millones de dólares, donde se mudó recientemente, y llegó a un acuerdo con Adele para deshacerse del que fue su hogar en los últimos 30 años. En un principio, Stallone había puesto en venta su impresionante mansión por un precio que rondaba los 100 millones de dólares, pero rebajó su precio hasta la mitad para poder librarse de ella.
Se estima que la fortuna de la cantante británica ronda los 180 millones de dólares, una cifra que sigue aumentando como consecuencia del lanzamiento de su último álbum 30, que no obtuvo más que elogios por parte de la crítica y se convirtió rápidamente en un gran éxito comercial. El nuevo material de la artista alcanzó el número 1 en el Reino Unido y Estados Unidos, donde se convirtió en el álbum más vendido del año después de solo tres días de lanzarse a la venta.
Si se suma el porcentaje de taquilla, la venta de discos y los diferentes proyectos audiovisuales que tiene en marcha, es probable que la británica perciba en poco más de un año una cifra superior a los 50 millones de dólares, justo el monto total de la operación de compra de la casa de Stallone.
La exclusiva mansión de 1.700 metros cuadrados está ubicada en una propiedad de 15.000 metros y consta de 8 dormitorios y 12 baños. La casa principal, construida en 1994, tiene 6 dormitorios y 9 baños, incluida una suite principal, 3 dormitorios y 2 dormitorios para el personal. La opulenta suite principal incluye sauna, baño de vapor y una oficina con terraza. Entre las excentricidades, cabe destacar una habitación que contiene una estatua gigante de Rocky y otra de Rambo disparando un arco y una flecha.
Encontrarse con una celebridad no es inusual cuando se recorren las calles de Los Ángeles. Tanto así que la historia de algunos vecindarios, como Beverly Hills, estuvo fuertemente ligada a la construcción de impresionantes mansiones que alojaron a famosos artistas desde la época dorada de Hollywood. Christina Aguilera, Britney Spears, Jennifer Aniston, Antonio Banderas y David Beckham fueron algunos de los famosos que eligieron propiedades cerca de la nueva casa de Adele.