La fiebre por las criptomonedas resurge durante Consensus, la mayor feria dedicada a estas divisas y a la tecnología de cadena de bloques en el mundo que se celebra en Nueva York, al tiempo que su mercado hierve con el bitcoin repuntando hasta los 8.082 dólares por unidad, el máximo en 10 meses.
Si bien ahora la moneda de referencia se encuentra 5,80% por debajo del valor de hace un año, y lejos del récord de 20.000 dólares que llegó marcar en diciembre de 2017, el repunte se explica en parte al entusiasmo en torno a Consensus, donde las empresas punteras en blockchain muestran sus novedades en esta tecnología e incluso, como cortesía, reparten un kilo de oro.
En declaraciones a Efe, el presidente de la agencia de corredores de activos digitales HiveEx.com, Fred Schebesta, explicó que en lo que va de año la capitalización de mercado (el valor del total de monedas puestas en circulación) ha aumentado 50%, hasta 189.240 millones de dólares, aunque todavía permanece lejos del máximo registrado el 8 de enero del año pasado, cuando alcanzó 833.000 millones.
Preguntado sobre si las tensiones comerciales o la inestabilidad puedan estar favoreciendo las inversiones en criptomonedas, Schebesta señaló que en países con gran inestabilidad, como el caso de Venezuela, el volumen del mercado se ha incrementado en 20 veces, debido a la facilidad con la que estos activos pueden atravesar las fronteras.
Para el analista de eToro, Mati Greenspan, el oro sube en línea con las criptomonedas, lo que muestra que los inversores no ceden una en favor de la otra, y que las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China podrían no ser tan determinantes.
Pero a la postre, resalta Greespan, después de este alza en Nueva York está el llamado efecto Consensus: »Hemos visto en varias ocasiones en el pasado que el mayor encuentro mundial de expertos en criptomonedas ha tenido un efecto significativo en el precio», donde el entusiasmo de sus expertos llama al alza en los mercados.
Novem Gold, una compañía con sede en Liechtenstein que comercia con el metal dorado, como promoción, ofrece estos 3 días de feria un gramo del material para las 1.000 primeras personas que se pasen por su puesto y se interesen por sus stablecoins (monedas respaldadas por un activo físico como divisas o materiales preciosos).
Las razones, explica a Efe su presidente, Andreas Kalteis, son la mayor liquidez de estos activos, en referencia con el valor seguro del oro, y las facilidades para su traslado internacional, a diferencia del metal. Asimismo, los costes de la venta de pequeñas fracciones de oro a veces son más elevados que la ganancia, por lo que son más recomendables para invertir en menores cantidades.
Las criptomonedas carecen de un banco central o administrador único y se basan en la tecnología blockchain o cadena de bloques, que funciona como un libro contable y público cuya seguridad radica en que la información es compartida entre todos sus usuarios y resulta difícil de falsificar.
Pasando de la fiebre del oro a la del bitcoin, miles de asistentes pasean por las distintas cabinas de las empresas presentes en el Hilton neoyorquino que acoge la convención, repartiendo tarjetas de contacto y a la vez interesándose en las últimas novedades de IBM o Microsoft, que también experimentan con la cadena de bloques.
Esta programación se encuentra presente también en teléfonos móviles, con la exhibición del Exodus 1 de HTC, un smartphone asegurado con estos procesos para proteger los datos del usuario, ocultándolos incluso del sistema operativo Android que da servicio al terminal.
Asimismo, algunas de las compañías aspiran a transformar el sector inmobiliario y el de los alquileres como Kahuna, que con una tecnología basada en la arquitectura de la moneda digital Ethereum crea una aplicación donde los arrendadores pueden poner sus propiedades en alquiler o controlar el perfil o historial crediticio de sus posibles arrendatarios.
Los pagos, además, pueden ser efectuados con la propia divisa de la aplicación para que se haga sin fricciones y rastreables. La feria trae consigo un resurgir de las criptomonedas en los mercados financieros después de un invierno de más de un año de duración en el que el bitcóin se dejó 80% de valor en 2018, según un estudio hecho público hoy por la agencia de corredores de activos digitales HiveEx.com.