El Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello proyecta un crecimiento económico de 8,6% este año en Venezuela. Estará impulsada por la recuperación en la producción y exportación de petróleo y la dinamización de los sectores de minería, transporte y comunicaciones, manufactura y agricultura.
En el informe Coyuntura Venezuela-Febrero 2022 se señala que en el país habrá desequilibrios importantes, aunque también ciertos avances en la estabilización de los precios y el tipo de cambio nominal, que inciden positivamente sobre el crecimiento de la economía interna, reseñó El Ucabista.
“Destaca la recuperación del crecimiento económico, que ya había comenzado durante el segundo semestre de 2021, aunque no se espera aún que la economía alcance los niveles prepandemia, que ya eran bastante bajos. La mejora en el nivel de actividad estaría fundamentada en una mayor producción y exportación de hidrocarburos, pero también en la expansión del PIB de varios sectores de la economía no petrolera”, señala.
Se esperan avances en la estabilización macroeconómica, particularmente de una reducción adicional de la tasa de inflación y de la estabilización del tipo de cambio nominal, indicaron los expertos.
Inflación de 225%
Las estimaciones de los analistas del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la UCAB proyectan además que el incremento de precios en el país cerrará el año en 225% y que probablemente el tipo de cambio real termine apreciado para finales de 2022.
“El incremento de los ingresos petroleros, un mayor nivel de actividad económica y los efectos de las medidas de política económica anunciadas a principios de año permitirían reducir el déficit fiscal y con ello se reduciría la necesidad de utilizar el impuesto inflacionario como mecanismo de financiamiento del sector público”, expone.
En el informe se destaca que las medidas del gobierno, relacionadas con la reducción del encaje legal y la autorización a la banca de utilizar 10% de sus captaciones en divisas para otorgar créditos en bolívares, podrían impulsar un crecimiento de casi 60% de la cartera crediticia del sistema financiero.
Los investigadores advirtieron sin embargo que los impuestos a las transacciones en divisas afectarán negativamente la dolarización y estimularán la informalidad de la economía. También se estaría “arriesgando innecesariamente” lo poco que hasta ahora se ha alcanzado en materia de estabilización y recuperación de la actividad económica.